El personal de las farmacias se exponen cada día para atender a posibles contagiados y a sus contactos estrechos. Como profesionales de la salud son un servicio esencial que no ha dejado de trabajar cara al público desde que empezó la crisis sanitaria. Fruto de esta exposición, en Canarias hay 46 boticarios que se han visto afectados por el coronavirus y han necesitado hospitalización o han tenido que estar en aislamiento. Esto supone que, según datos del Consejo General de Farmacéuticos, el Archipiélago es la tercera región de España donde más profesionales del sector se han contagiado con el virus, solo por detrás de Castilla y La Mancha (85) y Castilla y León (58).

En Las Palmas se han infectado cinco farmacéuticos y once técnicos y auxiliares; y en Santa Cruz han sido 15 farmacéuticos y otros 15 auxiliares, según la información facilitada por los colegios oficiales de ambas provincias. En cuanto a las oficinas de farmacia, se han visto afectadas 23 de las 762 con las que cuenta el Archipiélago. Si bien, ninguna ha tenido que cerrar sus puertas al público.

En la totalidad del territorio nacional al menos 495 miembros de los profesionales de las farmacias han contraído el virus. Además, han fallecido nueve farmacéuticos y dos auxiliares tras infectarse con el Covid-19. Por esto, el Consejo General de Farmacéuticos destaca la necesidad de que todos los farmacéuticos y profesionales de las farmacias "extremen" la precaución, y recuerda a la población la importancia de acudir a estos establecimientos solo en los casos necesarios.

El virus ha tenido especial incidencia entre el personal sanitario, síntoma de que estos profesionales han estado muy expuestos debido a la poca protección y a la falta de tiempo para actualizar los protocolos. En Canarias hay 488 personas de los equipos de medicina y enfermería contagiados. Esto supone que el 24% de los afectados en las Islas pertenecen a este colectivo, un porcentaje preocupante puesto que la media estatal es del 15,5% y es una de las tasas más altas a nivel internacional. En España han muerto 23 médicos, catorce de ellos de atención primaria, y otros siete profesionales del ámbito sanitario afectados por el Covid-19.

El Archipiélago llegó ayer a los 2.009 contagiados diagnosticados, 21 más que en la jornada anterior. La tasa de crecimiento se sitúa en el 1%, por lo que sufre un ligero repunte con respecto a la tendencia registrada en días anteriores. Si bien, está por debajo de la media estatal que alcanza el 2,9%.

Mayores de 70 años

El número de muertos por coronavirus sigue engrosándose en las Islas y ayer se registraron cuatro fallecimientos más, por lo que ya son 111 las personas que han perdido la batalla contra un virus que ha afectado a más de dos millones de personas en el mundo. El 78% de los fallecidos en el Archipiélago eran mayores de 70 años y el 8% eran usuarios de residencias de mayores.

Por islas, en Tenerife se han constatado 1.265 casos y 75 fallecidos; Gran Canaria acumula 480 positivos y 29 defunciones; La Palma tiene 83 contagios y cuatro fallecidos; Lanzarote suma 79 infectados y tres muertos; en Fuerteventura se han constatado 42 casos, una decena en La Gomera y cuatro en El Hierro.

Desde que se inició la crisis sanitaria, 802 personas han requerido ser ingresadas en algún centro hospitalario de la comunidad autónoma, y de ellos 156 han precisado ser atendidos en las unidades de cuidados intensivos (UCI). En este sentido, el portavoz del Gobierno de Canarias y consejero de Sanidad, Julio Pérez, aseguró ayer, en la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, que el Servicio Canario de Salud (SCS) se encuentra al 50% de su capacidad, en números redondos, y está preparado para afrontar un eventual repunte de los casos de coronavirus. Pérez explicó que el Archipiélago está "a la mitad de capacidad, e incluso mejor si se tiene en cuenta el número de camas y las plazas de UCI. "Tenemos holgura", aseveró.

El portavoz reconoció que "todo lo que no era urgente se ha demorado", por lo que la administración ha percibido que algunos pacientes llegan en situación más grave de lo habitual a los centros "porque han demorado el acceso a los servicios de urgencia o centros de salud". Por esto, pidió la población que si se encuentra mal, acudan al médico.

Por otra parte, el Ejecutivo regional estima que la evolución de la pandemia de coronavirus en las islas es "esperanzadora", por lo que cree que es hora de pensar en la "desescalada" y centrar la atención en la recuperación económica. Pérez desconoce el momento en el que el Gobierno central podrá iniciar la desescalada del confinamiento y no ve previsible que sea antes del 26 de abril. Si bien, destacó que eso no les exime de la responsabilidad de pensar en planificar cómo será la vuelta a la normalidad tras la pandemia.

Pérez ha insistido en que el Archipiélago no será objeto de "ningún tipo de experimento" ante esta crisis sanitaria, pero sí ve razonable que en islas en las que el impacto de la pandemia ha sido nulo, como La Graciosa, o leve, como El Hierro y La Gomera, se anticipen medidas que lleven a la población a vivir un día a día más cercano al que se vivía hace poco más de un mes.