Desde la llegada del coronavirus a nuestras vidas, cualquier acontecimiento que se salga fuera de la 'normalidad' lo vivimos como un hecho apocalíptico. Y ante este tipo de sucesos, surgen todo tipo de teorías conspiranoicas y negacionistas.

Ya sucedió con el propio virus, la llegada de Filomena -con voces que apuntaban a que no era nieve de verdad-, el volcán de la Palma y la guerra de Ucrania. Nada es lo que parece ser, a sus ojos. Siempre hay un grupo de dirigentes conspirando en contra de los ciudadanos. Por eso, y como no podía ser de otra manera en este mundo de especulaciones, los negacionistas de la calima, que ha teñido a España de naranja desde principio de la semana, no han tardado en salir a exponer sus teorías públicamente, en redes sociales, dudando de si lo que caía del cielo era realmente arena -polvo en suspensión proveniente del Sáhara-. 

Unas teorías que algunos han secundado con comentarios como "no es arena, parece polvo de ladrillo", mientras que otros han aprovechado para explicar realmente qué es la calima.