200 pacientes de Canarias, en seguimiento a través del proyecto 'Cuidamos +75'

Un total de 200 pacientes de las Islas –100 de cada provincia– recibirán seguimiento durante 18 meses a través del proyecto Cuidamos +75. ¿El objetivo? Averiguar el impacto que ha tenido el covid en la vida de las personas de 75 años o más. Se trata de una iniciativa financiada por el Instituto de Salud Carlos III y en ella participan profesionales de 11 comunidades autónomas. En total, el estudio se compone de tres subproyectos. «En concreto, estos pacientes forman parte del segundo. La muestra está integrada por mayores que han sufrido la enfermedad y por otros que no la han padecido para poder analizar si la afección ha provocado más necesidades de cuidados y un mayor declive funcional», explica Ruymán Brito, enfermero de la Gerencia de Atención Primaria de Tenerife y uno de los investigadores de este estudio. 

Tal y como indica el profesional, ya se ha comenzado a entrevistar a los pacientes. «Hemos conseguido reclutar al 50% de la muestra y nuestro propósito es llegar al 100% antes de que concluya enero», adelanta. Pero, ¿cómo se lleva a cabo la valoración de los mayores? La tarea corre a cargo de los enfermeros de Atención Primaria. «El grupo metodológico de investigadores les pasa un listado de todos los pacientes de su centro de salud que entran dentro de la franja etaria. Posteriormente, deberán llamarlos por teléfono y, a partir de ahí, se programa una entrevista en el propio centro o en el domicilio», detalla Brito. 

La investigación incluirá también a miles de pacientes a través de las historias electrónicas

Por lo que concierne al primer subproyecto, hay que decir que ahora mismo se están definiendo los criterios para poder proceder a la recogida de datos. Sin embargo, la labor se llevará a cabo a través de la información que refleja la historia electrónica de cada paciente. «Aún estamos consensuando los ítems que vamos a utilizar, ya que, en función de cada comunidad, existen diferencias entre los elementos de cada historia», anota el sanitario, que además informa de que la muestra también estará compuesta tanto por pacientes que han contraído la infección por SARS-CoV- 2 como por personas que no han pasado el virus. «Incluiremos a miles de sujetos y los datos serán totalmente anónimos», asevera. 

Cabe resaltar que la tercera parte de la iniciativa incluye a los cuidadores de las personas mayores. «Todavía no hemos acordado una cifra exacta de participantes, pero será más reducida que la de los pacientes», asegura el investigador. Las entrevistas a este grupo arrancarán en febrero y, en palabras de Brito, «tendrán un enfoque más cualitativo». De este modo, los cuestionarios estarán conformados por preguntas más abiertas para que los candidatos tengan la posibilidad de expresar en qué medida han tenido que cambiar sus vidas para dar cobertura a las necesidades de los afectados. 

Tal y como comunicó el pasado lunes la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, Cuidamos +75, que empezó a dar los primeros pasos a principios del pasado verano, se desarrollará durante los tres próximos años. No obstante, el plazo se podrá prorrogar si no se alcanzan los objetivos esperados. 

Los profesionales de Atención Primaria ya han reclutado al 50% de la muestra

«Queremos conocer las necesidades de cuidado que tienen ahora los mayores como consecuencia del coronavirus, describir esas demandas y averiguar el impacto que ha tenido en la vida de los cuidadores», recalca Ruymán Brito. «Los resultados nos permitirán realizar una mejor planificación y programación de los servicios de salud de Atención Primaria para poder responder a las necesidades de un colectivo tan vulnerable y a las de sus familias», agrega. 

Ahora bien, en el caso de los pacientes, ¿por qué se ha determinado que solo puedan participar las personas mayores de 75 años? El enfermero es contundente al respecto. «A partir del conocimiento disponible, se acordó que es a partir de esa edad cuando se acentúa el declive funcional y se puede apreciar mejor cómo el covid acelera la pérdida de autonomía para la vida diaria», apostilla el profesional de la Gerencia de Atención Primaria. 

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