Tribunales

El acusado de abusar de su sobrina en La Laja afronta seis años de cárcel

Un bañista que estaba en la playa grabó y sacó fotografías en las que se observa al encausado junto a la menor, de seis años, completamente desnuda

Playa de La Laja.

Playa de La Laja. / José Pérez Curbelo

Benyara Machinea

Benyara Machinea

La Fiscalía ha elevado su escrito de acusación contra el hombre acusado de abusar sexualmente de su sobrina de seis años de edad en la playa de La Laja, en Las Palmas de Gran Canaria, durante la tarde del uno de noviembre de 2022. El encausado, un vecino de la Vega de San José de 57 años, fue sorprendido por un bañista que vio cómo aparentemente tocaba las partes íntimas de su sobrina, que se encontraba completamente desnuda, en la zona de la barandilla y decidió grabarlo para afianzar su denuncia ante la Policía Nacional. A la vista de las imágenes y de la declaración de la menor, el Ministerio Público solicita una pena de cinco años y seis meses de cárcel y una indemnización de 3.000 euros por los daños morales ocasionados.

La acusación particular, que ejerce el letrado Roque Esteban García en representación de la víctima, eleva la petición a seis años de cárcel, con 10 de inhabilitación especial para ejercer cualquier profesión u oficio que conlleve contacto regular con menores, por un presunto delito de abuso sexual. El abogado reclama, a su vez, que se implante una orden de alejamiento hacia la víctima durante 10 años y que se le abone a su madre, como representante legal, la cantidad de 12.000 euros.

Los escritos que han elevado las acusaciones mantienen que, sobre las 16.00 horas del uno de noviembre, el encausado A. M. E. S. se encontraba en la playa de La Laja junto a la sobrina de su expareja y, "aprovechando que la menor estaba al lado de la barandilla sin bañador, con ánimo libidinoso, se pegó a la menor y comenzó a frotar su pene contra sus nalgas". Tanto la Fiscalía como la acusación particular sostienen que, en un momento dado, el hombre obligó a la menor "a que le tocara el pene".

Los agentes vieron las imágenes y, al apreciar indicios de un delito, detuvieron al presunto agresor

Los supuestos hechos habrían tenido lugar a plena luz del día, cuando el acusado estaba en la cala capitalina con un bañador tipo slip y acompañado de otra menor, que era su hija de 10 años. Fue entonces cuando un bañista se percató de que el adulto estaba aparentemente en estado de excitación y decidió grabar con su teléfono móvil lo que estaba pasando. También tomó varias fotografías con el fin de recabar pruebas gráficas.

Este testigo tomó la decisión de llamar a la Policía Nacional para alertar de los hechos y, al cabo de unos minutos, los agentes se desplegaron en la zona, visualizaron las grabaciones y certificaron que existían indicios de un posible delito de abuso sexual. El bañista ofreció entonces los datos del vehículo en el que vio al hombre salir del lugar junto a su hija y su sobrina y, con esta información, los agentes lo localizaron en la calle Málaga y procedieron a su detención.

Orden de alejamiento

El detenido pasó esa misma semana a disposición judicial. El titular del Juzgado de Instrucción número 2 de Las Palmas de Gran Canaria, Rafael Passaro Cabrera, decidió acordar una medida de libertad provisional con cargos después de tomarle declaración y visualizar las imágenes. También decretó, como medida de precaución, una orden de alejamiento hacia la víctima y hacia su hija y prohibirle ejercer cualquier empleo en el que esté en contacto con menores de edad.

La menor relató en fase de Instrucción que el encuentro en la playa no fue el único episodio de abusos sexuales que vivió por parte de su tío y afirmó que su familiar también le había practicado tocamientos en su vehículo y en otros puntos de Las Palmas de Gran Canaria. Sin embargo, las acusaciones no han presentado cargos por otras supuestas agresiones o abusos sexuales y, en los escritos de acusación, hablan únicamente del episodio en el arenal, sin calificarlo como un caso continuado.

Las partes han elevado sus escritos y el caso está a la espera de que se señale el día de juicio

El acusado se negó a declarar ante los agentes policiales que intervinieron en el momento de su detención, así como ante el juez cuando pasó a disposición judicial. El letrado Roque Esteban García llegó a solicitar la adopción, como medida cautelar, de una medida de prisión provisional al considerar que hay "indicios racionales de la comisión de una acción delictiva" por parte del investigado, pero finalmente no se adoptó esta decisión.

La fase de Instrucción ya ha concluido y, tras la remisión de los escritos por las partes intervinientes, el caso está a la espera de que se señale una próxima fecha para la celebración del juicio.