"De lo que se trata es de que la gente no solo aprenda a comer de manera saludable, sino que también sepa aprovechar las sobras del día anterior. Que no se tire comida porque aquí todo es aprovechable", señala Yaiza Ojeda Santana, que durante el año hace talleres de cocina sana en varios barrios del municipio, especialmente en Jinámar, Lomo Magullo y La Garita.
Para ella es fundamental que la gente sepa aprovechar hasta el último ingrediente para ser reutilizado en otros platos, sobre todo en esta época de crisis, donde el ahorro está a la orden del día de cualquier familia. "Con lo que sobra el día anterior podemos preparar suculentos platos", dice.
"Estamos acostumbrados a aprovechar el pollo asado del día anterior para hacer ropavieja o las sobras del pescado para preparar un buen salpicón, pero hay otras posibilidades y ahí es donde incido yo. Podemos preparar platos ricos y variados con los alimentos sobrantes", señala.
Yaiza se lleva su recetario a los talleres para explicar a los asistentes cómo preparar platos atractivos con lo sobrante del día anterior. No hay que tirar nada. La comida siempre es aprovechable si está en buen estado. Y normalmente si es una comida de un día a otro nunca tendremos problemas de que los alimentos estén caducados. Donde comen tres pueden comer cuatro y lo que se come hoy lo podemos comer también mañana".
Entre los ocho platos que ella propone en su particular recetario se encuentra la tortilla hecha con arroz blanco sobrante del día anterior. "Normalmente cuando hacemos una tortilla no pensamos que el arroz puede servir de ingrediente. Sin embargo, se puede hacer y además la tortilla sale estupenda".
Lo mismo pasa con las chuletas sobrantes de un asadero. "Si nos sobran chuletas de un asadero no hay que tirarlas ni guardarlas para otro asadero que no sabemos cuándo lo vamos a hacer. Esas chuletas se pueden hacer fácilmente al horno y así tenemos además un plato distinto. Es importante hacer ver que con los mismos ingredientes podemos preparar platos distintos con sabores totalmente diferentes".
Lo mismo pasa con la sopa de pan, donde se utiliza el pan duro de días anteriores. "O una compota o ensalada de cerdo con las sobras de la pata de cerdo que hemos casi consumido. Podemos prepararla con ajitos dorados, cebolla picadita, vino blanco, aceite y tomillo. El resultado es espectacular". Lo mismo ocurre con los pimientos de piquillo rellenos de pollo asado, un plato original que no suele verse por ahí.
En el apartado de postres destaca en su recetario un par de platos: los buñuelos de arroz y el pudin, donde se aprovecha el arroz y el pan sobrantes. "Además de aprovechables, son originales y distintos", recalca la monitora municipal.
Hace hincapié en lo que supone de ahorro para las familias estas recetas. "Estamos en una época de crisis pero todos tenemos que comer para poder vivir. Por eso es importante ahorrar y economizar en la comida. Si aprovechamos alimentos e ingredientes sobrantes en vez de tirarlos a la basura, podemos conseguir un importante ahorro. En mi casa no se tira nada".
En los talleres habituales que hace durante todo el año en las asociaciones vecinales se suele llenar el aforo. A cada uno de ellos va una quincena de personas, en su mayoría mujeres, "aunque también van algunos hombres. A los hombres los trato con mucho mimo porque son pocos y no quiero que se me vayan", dice entre risas.
"Desgraciadamente parece que la cocina sigue siendo cosa de mujeres cuando lo cierto es que los cocineros más famosos son hombres", sentencia Yaiza Ojeda.
