Valsequillo

Valsequillo y los ángeles de Gambia

Un grupo de mujeres se reúne cada lunes para coser compresas de tela y enviarlas al país africano

«Esto nos ha servido para darnos cuenta de lo que tenemos», dicen

Nueve de las mujeres implicadas en el proyecto cosen y preparan las compresas

Nueve de las mujeres implicadas en el proyecto cosen y preparan las compresas / Jose Carlos Guerra

Ángeles Mantecón, junto a sus 18 fieles, tiene a sus espaldas una responsabilidad muy grande: que mil compresas de tela lleguen a Gambia, en África, en el mes de junio. Para ello, cada lunes se reúnen en el teatro cronista oficial Jacinto Suárez Martel de Valsequillo para coserlas gracias a las telas recicladas que les han ido donando. Tres capas de toallas, dos de sábanas, una de antitranspirante y dos de algodón. Eso es suficiente para ayudar a las mujeres de Gambia cuando les viene la menstruación.

La iniciativa de esta ayuda al país vecino surge de la mano de Ángeles, cuando en el 2019 decide viajar hasta Gambia junto a su marido y conocer la realidad de África. Un viaje que no la dejó indiferente, pues a su vuelta a España decidió que no podía quedarse de brazos cruzados y hacer como si no hubiera visto nada. Pobreza, falta de medios y una brecha de desigualdad inmensa entre hombres y mujeres, sobre todo educativo. "Al principio pensamos en ayudar solo a una familia, pero nos paramos a pensar y llegamos a la conclusión de que no era justo, y que lo más coherente era apoyar a todo un poblado", explica Mantecón.

Subvenciones para el proyecto

Con la decisión tomada, este matrimonio se constituyó como asociación y con el paso del tiempo comenzaron a recibir subvenciones del Cabildo de Gran Canaria, Gobierno de CanariasCabildo de Tenerife, la FECAN, empresas y particulares para el proyecto, que recibe el nombre de 'The Monkey Girl'. "Cuando a las mujeres les viene la regla, no pueden ir a clase porque son mal consideradas, no hay agua ni luz, hay cólera y sarna en verano y no hay nada de higiene", apunta Ángeles. Estos motivos fueron los principales para que en su regreso no olvidara todos esos puntos que hacen a la población africana ser más frágil.

Elección de telas para las compresas

Elección de telas para las compresas / Jose Carlos Guerra

En Gambia, el hombre siempre tiene prioridad para todo, consideran que las mujeres no son inteligentes por el tema cultural y los sueldos son tan bajos, que muy pocas tienen el poder de comprar compresas. "El sueldo de un policía es de 60 euros al mes, mientras que 50 kilos de arroz cuesta 30, por lo que los cálculos no cuadran", argumenta Mantecón, quien ha convertido del pequeño país de África occidental su segunda residencia. El proyecto que ha llevado a cabo, consiste en becar a jóvenes en formación profesional y en la universidad, ya que cuando acaban el colegio tienen que irse fuera del poblado si quieren seguir estudiando, y muchos de ellos no pueden pagar el transporte.

Educar a los hombres

"En uno de los viajes nos dimos cuenta de que también tenemos que educar a los hombres, motivo por el que ahora tenemos a 60 chicas y 40 chicos con puestos de trabajo de apoyo sanitario y voluntariado", comenta. En el poblado, la asociación The Monkey Girl ha creado un centro en el que hay un restaurante que se llama Las Palmas Restaurant, llevando el nombre de la Isla por todo lo alto. Además, también tienen un salón de belleza, otro de costura, una panadería y un espacio educativo, en el que dan clases de matemáticas, inglés o alfabetización. En los próximos meses, como novedad, se instalará en Gambia el primer molino de gofio.

Entre telas, costuras y máquinas de coser

Entre telas, costuras y máquinas de coser / Jose Carlos Guerra

Este proyecto de compresas solidarias, tal y como comentan todas estas mujeres implicadas, ha salido adelante gracias a la implicación del Ayuntamiento de Valsequillo y a la concejala de Solidaridad y Cooperación, Leticia Ortega. Ella, no tiene dudas al afirmar que uno de sus sueños, después de poner en marcha este proyecto, es ver con sus propios ojos la realidad que está viviendo la población en Gambia. "Mi futuro proyecto, y viendo la acogida que ha tenido este, es hacer pañales para los bebés", apunta.

Apostar por África

Mientras tanto, estos ángeles de Gambia siguen cosiendo cada lunes con el fin de sacar una sonrisa a todas estas mujeres africanas, siendo conscientes de lo privilegiadas que son. "Queremos apostar por ellos, y que sean capaces de levantar al país", comentan mientras miden, eligen telas y charlan entre ellas. Dar ejemplo a la ciudadanía y lanzar un mensaje alto y claro: "Nosotros tenemos el reloj, pero ellos tienen el tiempo y tenemos que aprender de ellos", aseguran.

Un proyecto solidario y muchas historias a sus espaldas, no solo por parte de su fundadora y presidenta Ángeles, sino también de estas 18 personalidades que al enterarse de la propuesta, no dudaron en poner su granito de arena. "Esto nos ha servido para darnos cuenta y valorar lo que tenemos", dice una de ellas, mientras que otra agradece tanto a Leticia como a Mantecón esta oportunidad de ayudar. "Tenemos tanto que agradecerles... No solo por el bien que están haciendo, sino también para mentalizarnos de que a las cosas hay que darles valor", sentencian. Y es que a veces, entre tanto ruido, estrés y monotonía, lo mejor es parar y pensar en lo afortunados que podemos llegar a ser.

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