La meteorología colaboró ayer con los planes de la asociación de empresarios de la zona comercial abierta (ZCA) de San Gregorio y dio tregua a que se pudieran celebrar las numerosas actividades infantiles organizadas por la mayoría de sus calles, previas a la celebración del cambio de hora.

El único amarillo del color del aviso por lluvias anunciado que se vio fue el de un sol radiante hasta las 13.00 horas, luego apagado por algunas nubes negras y un airecillo que animaba a ponerse una prenda para resguardarse del fresco, pero sin agua.

Fueron cuatro horas donde los más pequeños arrastraron a sus padres -uno de los reclamos de los organizadores- a la zonas de juegos desde las 11.00 a las 14.00 horas, aunque por la tarde, desde las 17.30 a las 20.30 horas, hubo continuación del tiro con arco, karts para niños de distintas edades, juegos grandes y minijuegos, talleres de dibujo, entre otras atracciones que concentraron a numeroso público en las calles de la zona comercial.

Los negocios, todos abiertos, según señalaba con satisfacción Mónica Muñoz, presidenta de la asociación de comerciantes de San Gregorio, ofrecían sus ofertas sabedores de que la jornada sería larga y el número de potenciales clientes, mucho más numeroso de lo habitual, fueron el complemento para la dinamización de los negocios en el primer cambio horario de este año.

La feria de artesanía, con 14 puestos, se sumaba a la oferta de compras con productos diversos, entre lo tradicional y lo moderno.

Al principio, pocos eran los que se habían acercado a las actividades, pero el ambiente se fue animando sobre las 12.00 horas, cuando casi de súbito, en las calles comenzaron a oírse las voces de los menores, la música ambiental y el trasiego de peatones.

No hubo tregua, los peques afanados en sus juegos, curiosos con los que no conocían y entusiasmados con la variedad, se divertían mucho. Un espectáculo del que disfrutaban sus familiares, tanto ayudándoles a jugar como haciéndoles fotos. Ajedrez, parchís, minibolos, juegos de habilidad, minifutbolines ocuparon el espacio usado siempre, menos ayer, por los vehículos que circulan por las vías que conforman la arteria comercial del municipio.

Así continuaba la jornada matutina cuando entró en escena el pasacalle infantil, amenizado con la batucada Castillerhos, zancudos, arlequines y otros personajes a los que se fueron sumando niños y mayores durante su recorrido por el barrio comercial, iniciado en la plaza de San Gregorio y que visitó todas las calles con actividades.

A su paso, fotografías y vídeos con los móviles de los presentes, de quienes también disfrutaban del día en las terrazas abarrotadas de clientes y en los restaurantes, imbuidos en la preparación de sus platos y mesas para atender no solo a los comensales de sobremesa, sino a los que se incorporarían más tarde, ya entrada casi la noche, después de los tres conciertos previstos en sendos escenarios en la zona comercial. Tío Matt, a las 19.30 horas; Flash Funk, a las 21.00, y Los Lola, a las 22.30 horas, amenizaron el resto del Telde cambia la hora.

Esta madrugada fue el turno del servicio especial de limpieza.