A finales de los años 70 el Cabildo de Gran Canaria iniciaba la obra de construcción del puerto de Taliarte, como respuesta a la demanda de los pescadores de Melenara que se quedaban sin poder hacer uso del arenal para varar sus barcos, y tras el desalojo de sus casetas donde guardaban las artes de pesca. Hoy, 46 años después, las instalaciones portuarias, a pesar de recibir durante todas estas décadas nuevos inquilinos que proyectan ciencia en ámbitos internacionales, acoger a casi cien profesionales a bordo de 22 barcos en sus atraques, y dar cobertura a una de las principales industrias de acuicultura del país, muestra unas infraestructuras "bastante en precario", fruto de su "abandono durante décadas", según expresaba ayer el presidente de la corporación, Antonio Morales, en una visita a las instalaciones en las que anunciaba una primera partida de 1.600.000 euros a la que seguirán otras inyecciones de fondos para, en el marco de un plan director, conseguir que en su mandato Taliarte sea un referente y un polo de atracción de actividades que "permita avanzar en la diversificación de nuestra economía".
Acompañado por el consejero de Presidencia, Teodoro Sosa, el presidente recorría el muelle junto a representantes de las empresas e instituciones ancladas en el muelle teldense, entre otros, el patrón mayor de la cofradía, Juan Francisco Guerra; el director de la Plataforma Oceánica de Canarias, José Joaquín Hernández Brito; y el consejero delegado de la empresa de acuicultura Aquanaria, Gustavo Larrazábal, que mostraban el apoyo a la iniciativa cabildicia.
En detalles la propuesta implica aumentar la línea de atraque de los 700 metros actuales en un 50 por ciento hasta llegar a los 1.080; dotar al recinto de 80.000 metros cuadrados, de propiedad insular, de un edificio de usos múltiples, cuyo proyecto está en desarrollo, para pasar por el pleno de la corporación en septiembre y que incluiría una zona de restauración; la reforma integral del varadero, que contempla la dotación de una lonja; y la delimitación de espacios para su uso deportivo, pesquero, científico y de ocio y disfrute de un espacio que a día de hoy se encuentra "a espaldas de los ciudadanos de Melenara", según apostilló Morales.
Desde su construcción el puerto deportivo y pesquero, también sede de entidades como la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, solo ha recibido arreglos puntuales, el último de mayor entidad en 2010 cuando se inyectaron dos millones de euros con los que se aumentaron los pantalanes y se reforzó el dique con nuevos bloques de hormigón. Pero poco más.
Lo que pretende el Cabildo en esta ocasión es sentar a todos los agentes implicados para "su relanzamiento", lo que incluye un reglamento de uso y gestión, "que se aprobará en octubre" y su cambio de denominación como Puerto Deportivo, Pesquero y Científico de Taliarte, que refleje "la triple vertiente a la que aspira a convertirse en referente".
Las primeras actuaciones ya se han realizado con una limpieza de choque en superficie a la que continuará otra de los fondos del muelle, para pasar a la renovación de las luminarias y su sustitución con led. También se reforzará de nuevo la escollera de forma que proteja más a las embarcaciones de los embates del tiempo norte.
A eso se suma, según desgranó el presidente insular, la culminación del vallado perimetral y la implantación de un refuerzo de vigilancia mediante cámaras y una red contraincendios.
También se adaptar el pretil del muro para facilitar la entrada de visitantes y convertirlo en zona de paseo y ocio.
Para el sector pesquero, se arreglará el foso, hoy inutilizado, y en primera instancia se instalará un nuevo pantalán para facilitar el trasiego de las capturas, además de renovar la grúa de travelift de izado y botadura de las embarcaciones, así como la pluma de manipulación de esas capturas.
