Comportamiento animal

Las cigüeñas más viejas llegan más rápido a su destino

Escogen las mejores rutas y ocupan los mejores sitios para anidar gracias a la experiencia

Una cigüeña blanca vuela en Alemania, durante la investigación.

Una cigüeña blanca vuela en Alemania, durante la investigación. / Christian Ziegler.

Redacción T21

Durante la migración, las cigüeñas blancas llegan a su destino más rápido a medida que envejecen. Con el paso de los años aprenden cuáles son las mejores rutas migratorias hacia el sur y viceversa.

Una investigación dirigida por científicos de la Universidad de Wyoming (USA) y del Instituto Max Planck de Comportamiento Animal (Alemania) muestra que los animales migratorios refinan su comportamiento a medida que envejecen, lo que sugiere que el aprendizaje experiencial es una parte importante de una migración exitosa.

Si bien la genética y el comportamiento social son factores importantes que dan forma a las migraciones animales, la información obtenida a través de la experiencia individual también parece ayudar a dar forma a los movimientos migratorios, afirma un equipo de investigación dirigido por Ellen Aikens. Los resultados de este trabajo se publican en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).

Seguimiento sofisticado

El estudio, en el que también participaron investigadores de la Universidad de Konstanz en Konstanz, Alemania, implicó un seguimiento técnicamente sofisticado de más de 250 cigüeñas blancas repartidas en cinco áreas de reproducción en el sur de Alemania y Austria entre 2013 y 2020.

Los datos de seguimiento recopilados por los investigadores no sólo identificaron las rutas de migración de las cigüeñas, sino que también midieron el tiempo y el ritmo de las cigüeñas individuales, así como estimaron la cantidad de energía que utilizan las cigüeñas mientras vuelan.

El equipo descubrió que, si bien las cigüeñas jóvenes se tomaban su tiempo para explorar nuevos lugares durante la migración, sus migraciones se hacían más rápidas a medida que envejecían. Esto les permite ahorrar energía y escoger los mejores sitios cuando llegan a su destino.

"A medida que las aves envejecen y adquieren más experiencia, los individuos mayores dejan de explorar nuevos lugares y, en cambio, se mueven más rápida y directamente, lo que resulta en un mayor ahorro de energía durante el vuelo migratorio", explica Aikens.

Y añade: "durante la migración de primavera, los individuos innovaron en atajos novedosos durante la transición de la vida temprana a la edad adulta, lo que sugiere una dependencia de la memoria espacial adquirida a través del aprendizaje".

Aprenden volando (en los dos sentidos)

Según los investigadores, las cigüeñas individuales enderezaron gradualmente sus rutas migratorias para encontrar formas más directas de moverse entre destinos durante la migración de primavera a las zonas de reproducción y anidación de verano. Los hallazgos podrían tener implicaciones para una variedad de otras especies de animales migratorios.

Los investigadores no descartan la importancia de la genética y la "información heredada culturalmente" en las migraciones animales, pero dicen que los nuevos hallazgos apuntan a la experiencia individual como otro factor clave.

"Ya sea que la primera migración esté guiada por la genética o por el resultado de seguir a individuos informados, el aprendizaje a lo largo de la vida representa un mecanismo adicional y complementario que da forma a la migración animal", dice el artículo.

Eso significa que las experiencias tempranas de la vida juegan un papel importante en la migración de las aves. Según el estudio, las cigüeñas, que viven una media de ocho años, se consideran animales jóvenes hasta los tres años.

Referencia

Learning shapes the development of migratory behavior. Ellen O. Aikens et al. PNAS, March 4, 2024, 121 (12) e2306389121. DOI:https://doi.org/10.1073/pnas.2306389121