La UD Las Palmas. De hecho, los primeros contactos ya se han producido y el que fuera el técnico del segundo equipo en la temporada 2016-17, y del primero durante las seis primeras jornadas de la 2017-18, está cerca de regresar al club después de haber dimitido hace algo más de un año y medio.
El principal valedor del catalán tiene un nombre y un apellido, Manuel Rodríguez, alias Tonono, director de formación y captación de la entidad. Del poder definitivo que tenga tras la llegada de Rocco Maiorino a la dirección deportiva dependerá la llegada de Márquez.
De hecho, el regreso del entrenador bajo cuyo mando Las Palmas Atlético ascendió a la Segunda B desde la Tercera ya se barajó el pasado mes de marzo, cuando el cuadro que ahora dirige Juan Manuel Rodríguez se encontraba inmerso en una muy mala racha de resultados de la que ha salido en las dos últimas semanas gracias a sendos triunfos.
La UD, finalmente, optó por la continuidad del grancanario en el banquillo y, en principio, la decisión parece ser acertada, toda vez que el filial se encuentra ahora con seis puntos por encima de los puestos de descenso -el que obliga a jugar una eliminatoria por la permanencia lo tiene a dos-. Sin embargo, eso no significa que hay dejado de lado su interés por que Manolo Márquez vuelva a tomar las riendas del equipo 'B'.
La misión incumplida
En el tiempo en que ha estado desligado del club, el preparador siempre ha reparado en elogios hacia la UD, para la que sólo ha tenido buenas palabras. Su salida se produjo en un contexto complicado, cuando Las Palmas se encontró con que no tenía entrenador a pocos días del comienzo de la pretemporada de 2017 tras la rotura del acuerdo con Roberto De Zerbi y acudió a él como medida de urgencia.
En realidad, el plan para Márquez era mucho más ambicioso. Con su figura se pretendía asentar a un entrenador en el filial y, sobre todo, afianzar un estilo, una manera de hacer las cosas, de trabajar la cantera. El técnico, además, creó un vínculo muy especial con los jugadores. Incluso, estableció vínculos de amistad con alguno de ellos más allá del entorno profesional.
Aunque cada vez son menos los futbolistas que quedan de entonces -Benito, Borja Herreraya no están-, el vestuario acogería con agrado la vuelta del catalán, a pesar de que la plantilla sufrirá un cambio de cromos significativo de cara a la campaña que viene, esté el equipo en Segunda B o en Tercera.
Uno de los retos principales que se propuso Maiorino nada más llegar fue el de dar un giro a la base. En el nuevo organigrama de la UD, el italiano, cuya mayor experiencia en el Milan fue, precisamente, con los equipos filiales, dirige tanto la parcela deportiva general como la cantera, es decir, que Tonono ahora está por debajo suyo.
En sintonía con Mel
Sin embargo, el grancanario parece haberle convencido para que Manolo Márquez sea el encargado no sólo de dirigir a Las Palmas Atlético, sino también de coordinar junto a un equipo de trabajo las categorías inferiores. En principio, la intención del club es recolocar a Juan Manuel Rodríguez, el técnico actual, dentro del departamento.
La UD quiere dar la oportunidad que le negó al catalán de iniciar un proyecto de cantera y por eso ya ha contactado con él, aunque todavía no hay un acuerdo sellado. La entidad amarilla pretende centrar toda la atención en que el equipo salve la categoría, sin embargo, trabaja desde hace meses de cara al futuro.
Sin ir más lejos el propio entrenador de la UD, Pepe Mel, confesó que ya se habían producido reuniones para planificar el curso venidero, lo que significa que el club cuenta con la continuidad el madrileño, quien, por otra parte, también quiere tirar de jugadores de abajo y estaría en la misma sintonía que Márquez. Las Palmas piensa ya en su porvenir y quiere que el catalán forme parte de él.
