El Moleiro más sincero: "Tuve un bloqueo de todo, pero ya de mente estoy más fuerte"

Moleiro charla con LA PROVINCIA durante la concentración de la UD Las Palmas en Estepona (Málaga).

Alberto Moleiro, en el 'Atalaya Football Center' de Estepona (Málaga), ayer por la mañana.

Alberto Moleiro, en el 'Atalaya Football Center' de Estepona (Málaga), ayer por la mañana. / laprovincia.es

A Alberto Moleiro (Santa Cruz de Tenerife, 2003) le ha crecido la barba. Tras una temporada pasada en la que admite que llegó a sufrir un «bloqueo de todo», afronta el curso que viene en Primera mucho más fuerte de mente y con la madurez que pueda tener un niño de 19 años. Tras el entreno de la mañana, se sincera con LA PROVINCIA.

Hace exactamente un año que hablaba con usted en un hotel de Mijas. ¿En qué ha cambiado Moleiro en este tiempo?

La verdad que me veo un poco más maduro, sobre todo en el campo, con un poquito más de tranquilidad. Los capitanes y la gente más veterana me ha transmitido eso, que debo tener más tranquilidad y sí que es verdad que voy entendiendo un poco más el juego. Me voy viendo mejor.

Me decía entonces que todavía era un niño. ¿Se ha convertido ya en un hombre?

[se ríe] No, no, que va. Sigo siendo un niño. Tengo 19 años todavía –en septiembre cumple 20–.

Y ya ha recibido una oferta del FC Barcelona, la del año pasado. Lo primero, y para que quede claro a todo el mundo: ¿Se queda en la UD Las Palmas?

Sí, este año nos quedamos en principio. 

¿Mejor así, sin que se hable tanto de cuántos equipos le quieren?

El objetivo era ascender a Primera y ahora toca disfrutar de la categoría, que yo creo que es bonita. Y sí, yo prefiero la verdad que no se hable, estar tranquilo. Yo creo que todo el mundo lo prefiere, pero bueno, ya uno se acostumbra a que se hable. Hay que llevarlo de la mejor manera.

Tengo claro que quiero romperla, que quiero hacerlo bien, pero no me quiero meter presión

undefined

Más que se hable, lo que le conviene es romperla este año y así novias no le faltarán, ¿no cree?

Sí, tengo claro que quiero romperla, que quiero hacerlo bien, pero no me quiero meter presión. No es tengo que romperla, sino que quiero hacerlo. Entonces, no es una presión añadida, sino ganas, ganas de que empiece el primer partido y a ver qué pasa.

En cualquier caso, en Primera División los focos son mucho mayores, por lo que igual ya de por sí hay una cierta presión intrínseca.

No, yo presión no tengo. Yo, de verdad, es el año que menos presión he tenido de las tres pretemporadas que he hecho. Nosotros, no tenemos nada que perder. Tenemos que salir a jugar y a divertirnos, que así es como funcionamos nosotros.

¿Puede ser esa una de las ventajas de la UD, el hecho de no tener un objetivo mayor que ser mejor que al menos tres equipos?

A ver, nosotros aspiramos siempre a lo más grande, que en este caso es ganar la Liga, pero sabemos que es muy difícil. Si salimos a disfrutar yo creo que daremos nuestra mejor versión.

Tanto el entrenador como alguno de sus compañeros coinciden en que este equipo puede jugar mejor en Primera que en Segunda, ¿usted también? 

No he tenido la suerte de jugar en Primera, pero muchos amigos y conocidos creen que sí. De hecho, el otro día estuve hablando con Samú Costa el del Almería y me dijo que nosotros funcionaremos mucho mejor en Primera que en Segunda. Hay que verlo. Mucha gente lo ha dicho, pero después hay que demostrarlo en el campo.

Los marcajes igual son más duros. ¿Cuenta con ello?

Sí, claro. Me imagino cómo son los defensas en Primera. Conozco a todos, yo creo, y a cada cual más duro.

El asunto del gol. Me decía el año pasado que el míster le había pedido entre 10 y 12 goles. Antes que nada: ¿Se ha reconciliado con los postes?

Sí, ahora acabo de dar uno –en el entrenamiento matutino que acaba de terminar–, pero bueno. Yo creo que tengo que llegar más al área. Esa es la base, porque el año pasado pisé poquitas veces el área, aunque sí es verdad que tuve cinco o seis palos. Tengo acercarme más y crear más peligro, que creo que ahí es donde soy bueno.

La falta de gol me generó ansiedad. A lo mejor llegaba la hora de tirar o algo y ya tenía en mente que iba a fallar

undefined

¿La falta de gol llegó a crearle ansiedad la temporada pasada?

Sí, a lo mejor llegaba la hora de tirar o algo y ya tenía en mente que iba a fallar o que no estaba convencido. El verano me vino bien para refrescarme un poco la mente y volver con ganas. Ahora la que tenga, para dentro.

Imagino que eso va con la edad, obsesionarse con cosas que cuando menos las piensas, es cuando salen.

Sí. Aparte del tema del gol, a veces pierdo balones y yo solo me obsesiono con esa pérdida y estoy todo el partido pensando en ella, y a lo mejor no tiene ni importancia. Es parte del aprendizaje que me toca vivir.

Todo esto, en cierta forma, está relacionado con esa pausa a la que se refería al principio de esta entrevista. ¿En qué ha notado esa evolución?

Ya me paro, a veces, a mirar el juego. Miro antes de recibir, que eso es muy importante.

¿Lo ha aprendido de Jonathan Viera?

Me lo ha dicho muchas veces él y por eso le estoy muy agradecido.

¿Con quién comparte habitación en la concentración?

Con Sergi Cardona, siempre. 

El verano pasado estuvo con Álvaro, uno del filial...

Sí, pero bueno, toda la Liga estuve con Sergi y este año será igual. Tenemos una muy buena amistad.

Usted podría considerarse el padrino de los canteranos que están aquí, porque pese a sus 19 años es ya todo un veterano.

Bueno, más o menos. Tengo barba y eso, pero sí, es verdad que a Iñaki, a Juanma, a Álvaro, a Pau y a Palanca los conozco porque tienen casi mi edad. No me ven como un veterano, sino como un amigo. Les aconsejo muchas veces que estén tranquilos. Lo mismo que hizo conmigo Yoni intento transmitírselo a ellos.

Centrémonos en Juanma, que ha destacado hasta ahora. Es un toro, un tipo de central de los que ya se ve poco. ¿Siempre fue así?

Sí, la verdad que es un animal. Le ves el cuerpo y no parece que tenga 19 años, sino que parece mayor. Si mejora dos o tres cositas con balón y entiende un poco más el juego sería muy bueno. Todavía es muy joven y tiene que aprender mucho. Va por el buen camino. No se achica.

¿A quién le gustaría hacer un regate el curso que viene? Imagino que a algún madridista porque usted es del Barça...

Eh, a uno del Barça también. Me gustaría a alguno que sea difícil, como Ronald Araujo, porque se valora más.

¿Y a Rudiger?

No, ese te levanta [se ríe]. Pero bueno, a todos me gustaría hacerles regates.

¿En que campo de todos los de Primera sueñas que firmar una gran actuación?

A ver, los míticos como el Bernabéu, el Camp Nou, que ahora no está, Montjuic, el Metropolitano... Todos, pero en especial el Gran Canaria. El Estadio en Primera no tiene nada que ver con el Estadio en Segunda. Tengo muchas ganas ya de que empiece el primer partido para verlo.

He visto el 3-3 del Bernabéu tres veces o cuatro veces por 'Youtube'. Jonathan, Tana, Vicente, Jesé... Se marcaron un partidazo

undefined

¿Dónde estaba cuando el 3-3 del Bernabéu, en marzo de 2017?

Estaba en mi casa en Tenerife viéndolo, eh. Y me he visto el partido tres veces o cuatro veces por Youtube. Jonathan, Tana, Vicente, Jesé... Se marcaron un partidazo todos.

¿Sueña con poder protagonizar una noche igual?

Tengo ganas de jugar ahí, de ver cómo es porque nunca he estado en el Bernabéu. Yo creo que podemos hacerle un buen partido, de cara a cara.

¿Le supuso una decepción no estar en la Eurocopa sub 21? Aunque bueno, no iba convocado desde septiembre.

Sinceramente, y no es por quedar bien, no me lo merecía. En septiembre sí es verdad que estuvo bien y me vi con nivel alto. En enero y febrero estuve también bien, pero antes del Europeo tuve dos meses que hasta yo mismo me notaba que no estaba a mi mejor nivel. Sinceramente, no me lo merecía y por eso no fui.

Hubo una época en la que no daba asistencias ni nada y pensaba que no hacía nada en el equipo

undefined

¿El motivo era más físico o mental?

Mental, un bloqueo de todo. Encadenamos la derrota del derbi, después la de Granada... Yo creo que ahí mi mente me afectó bastante, pero bueno, de eso salí más fuerte. Richi –el coach, que no sigue la próxima temporada– me ayudó bastante y yo creo que ya de mente estoy más fuerte, más capacitado.

¿Qué sentía?

Sentía como que no... No sé, yo me veía en el campo y me veía a lo mejor más pequeño, me escondía más.

¿Falta de confianza?

Un poquito falta de confianza, sí. Tampoco me entraban los goles. Hubo una época en la que no daba asistencias ni nada y pensaba que no hacía nada en el equipo. Será por la edad. Mis padres me ayudaron muchísimo, mi hermana también. Hablando con ellos me hicieron entender que yo tenía que salir a jugar y no a hacer asistencia ni goles.

A largo plazo el objetivo colectivo es la permanencia, y personalmente estar en los Juegos Olímpicos con España

undefined

Ahora que está completamente reseteado, dígame un deseo personal y colectivo que no sea ganar la Liga.

Te voy a decir uno a corto y otro a largo plazo. A corto plazo, personalmente, llegar al partido del Mallorca al 100%, y colectivamente ganar el partido. A largo plazo, la permanencia, y personalmente estar en los Juegos Olímpicos con España. Para mí supondría un sueño. Son unos Juegos Olímpicos y todo el mundo quiere ir.

Suscríbete para seguir leyendo