Los 24 puntos siguen la estela de la UD de 1978-79

Las Palmas de García Pimienta ya es mejor a estas alturas que Las Palmas de Quique Setién en la temporada 2016-17. Han tenido que pasar cuarenta y cinco años para que el equipo amarillo siga la estela de su mejor registro hasta la fecha. Siete victorias y cinco empates en la campaña 1978-79 mantenían a los amarillos en la cuarta plaza con 19 puntos –que a la equivalencia actual con el valor de tres puntos por victoria serían 26–.

Con el triunfo de ayer en Mendizorroza la UD alcanzó los 24 puntos para mantenerse en la octava posición y acechar la zona europea a dos unidades del Betis, que es séptimo tras empatar ayer frente al Real Madrid y a cuatro del Athletic, que se enfrenta hoy al Granada en el Nuevo Los Cármenes (15.15 horas).

Un rendimiento que viene avalado por la firmeza defensiva de los hombres de Pimienta. Sumaron en Vitoria una nueva portería a cero, la cuarta de la temporada, lo que mantiene a Álvaro Valles como el Zamora de la categoría con un coeficiente de 0,81 goles encajados de los trece recibidos en 16 partidos. El segundo en la estadística, David Soria, ha recibido 20 goles, siete más que el de La Rinconada, que ayer se exhibió frente a Samu Omorodion con un paradón con su rodilla clavada en el suelo.

El rigor defensivo de la línea formada por los Araujo-Álex Suárez, Coco, Mika Mármol y Sergi Cardona sólo ha encajado en un partido más de un gol. El del día que visitó el Santiago Bernabéu, cuando el Real Madrid venció por 2-0 y en el que Valles pintó un lienzo digno del Museo del Prado con siete paradones en la primera parte.

Y es que a diferencia de lo que ocurría con el equipo que dirigía Quique Setién en la temporada 2016-17, cuando los amarillos realizaron una primera vuelta liguera notable, el equipo de esta campaña es un cerrojo.

Hace siete cursos atrás, a estas alturas Las Palmas marchaba con 21 puntos después de cinco triunfos, seis empates y cinco derrotas. Mientras que el balance de goles anotados por encajados era de 26 y 24. Más pólvora, menor solidez en la retaguardia.

Con esta cerrazón en la zona trasera, la UD tiene el mejor registro defensivo de equipos que hayan conseguido 24 puntos con el factor de tres puntos por victoria. Dato compartido con Osasuna.

Y en cuanto a mayor rédito de puntuación con tan pocos goles anotados, es el segundo mejor de la historia. Que Las Palmas ostente 24 puntos con tan sólo 14 goles anotados es casi un milagro, aunque el Logroñés de la temporada 1990-91 lo consiguió con menor acierto de cara a las porterías contrarias, pues fue capaz de hacerlo con un gol menos, trece. Una mayor amortización resulta prácticamente imposible.

A cero un lustro después

Con el 0-1 en Vitoria volvió Las Palmas a dejar una portería a cero en Primera División cinco años después. La última vez que lo hizo fue frente al Leganés en la campaña 2017-18, en la vigesimoquinta jornada, con un empate sin goles. Esa temporada se terminó descendiendo.

La anterior vez que lo había logrado la Unión Deportiva había sido en la temporada 2015-16, sin conseguir en la de Setién completa dejar ni una vez la portería inmaculada lejos de Gran Canaria.

Fue contra la Real Sociedad, en la trigésimo jornada –con Setién en el banquillo tras sustituir a Paco Herrera–, en un triunfo amarillo por 0-1.

Pero por si no fuera poco, esta Unión Deportiva es fiable en cuanto a seriedad pragmática. Si se pone por delante en el marcador, lo más seguro es que el gane.

Ayer lo demostró en Vitoria y tan sólo el Mallorca y Osasuna fueron capaces de igualarles, por lo que de las ocho ocasiones que se han adelantado, seis de ellas han terminado en triunfo. O lo que es lo mismo, de sus 24 puntos, 20 han llegado después de que pusieran el 1-0.