Los tres trucos infalibles para que las cucarachas sean historia en tu casa

Estos insectos son una de las molestias más grandes ahora que llega el verano 

La entrada del calor y las altas temperaturas también lleva asociado la llegada de uno de los insectos más molestos de todo el verano: las cucarachas. Estos molestos insectos hacen acto de presencia en zonas delicadas de nuestro hogar como el baño o la cocina y en muchas ocasiones terminan siendo un problema mayor. Existen algunos trucos caseros que podemos poner en práctica para alejar estos bichos de nuestra casa.

Las cucarachas pueden acceder a nuestra casa a través de las puertas y ventanas que suelen estar más abiertas ahora con la llegada del calor. Una vez en el interior ya buscan un lugar dónde asentarse y por ese motivo es importante terminar con ellas antes de que se reproduzcan y se conviertan en un problema mucho más serio.

Trucos caseros para acabar con las cucarachas

Bicarbonato de sodio y azúcar:

La combinación de bicarbonato de sodio y azúcar puede ser un arma poderosa contra las cucarachas. Mezcla partes iguales de ambos ingredientes y colócalos en tapas de frascos o platos pequeños en áreas donde hayas visto cucarachas o sospeches que puedan habitar. El dulce aroma del azúcar atraerá a las cucarachas, y cuando consuman la mezcla, el bicarbonato de sodio actuará como un veneno para ellas. Recuerda reemplazar la mezcla regularmente para mantenerla fresca y efectiva.

Ácido bórico:

El ácido bórico es otro aliado efectivo para deshacerte de las cucarachas. Espolvorea pequeñas cantidades de ácido bórico en áreas estratégicas donde las cucarachas frecuentan, como rincones oscuros, detrás de electrodomésticos o debajo del fregadero. El ácido bórico se adhiere a las patas de las cucarachas y, al ser ingerido durante su proceso de limpieza, les causa daño interno y las elimina. Es importante tener precaución al utilizar ácido bórico en hogares con mascotas o niños pequeños, manteniéndolo fuera de su alcance.

Menta y aceite de eucalipto:

El aroma de la menta y el aceite de eucalipto resulta repelente para las cucarachas. Prepara una solución diluyendo unas gotas de aceite de eucalipto en agua y añadiendo unas hojas de menta fresca. Luego, rocía esta solución en las áreas donde sospeches la presencia de cucarachas, como grietas, zócalos o rincones. El olor resultante actuará como un repelente natural y ayudará a mantener a raya a estos insectos indeseables.