Una vez más el fútbol ha sido motivo de inspiración para las Monas de Pascua, una tradición catalana en el día de Pascua. Christian Escrivà ha elaborado una mona gigante con dos figuras que emulan a Messi (triste) y Cristiano (alegre) con una pequeña copa rota a los pies del madridista. El famoso pastelero catalán espera cambiar la sonrisa el próximo miércoles, para lo que volverá a trabajar de noche.