El antiguo mercado de Telde ha cambiado los puestos de frutas y verduras por aulas y centros de ocio para los jóvenes de la ciudad. El histórico inmueble proyectado por José Enrique Marrero Regalado se ocupa ahora de acoger espectáculos y actividades culturales en su etapa como Casa de la Juventud, a la espera de una reforma integral con la que espera mejorar su acceso a la plaza colindante y las humedades de las paredes.

La Casa de la Juventud de Telde se erige en pleno casco de la ciudad como uno de esos bienes patrimoniales que han dejado atrás el propósito inicial para el que fueron construidos bajo el lema de renovarse o morir. Sus inicios como mercado municipal quedaron atrás en los años 80 con la apertura del nuevo recinto y el inmueble permaneció en desuso durante 10 años