Es la fiesta grande de los estadounidenses, su celebración más auténtica, con raíces en el siglo XVII. Es el único puente largo del año. Todos hacen las maletas, y vuelven a su casa para cenar en familia. Aunque este año un grupo de congresistas hará una excepción y se comerán el pavo en Washington en bsca del acuerdo entre republicanos y democratas, que si no se logra, provocará una subida de impuestos y recortes a partior del 31 de dicembre, el llamado "abismo fiscal". Algo, a pesar de su sonrisa, en lo que seguro que también está pensando el presidente en su tradicional reparto de alimentos a los mas necesitados. Otros disfrutan de la fiesta sin preocupaciones. En los angeles, el anciano Kirk Douglas, todavía tiene energía para repartir alimentos junto a su mujer pese a tener 95 años. El tiempo pasa para todos. Neil Patrick Harris dice que es importante reconocer la labor de estas mi