María del Carmen Batista Hernández y Nicolás De León Fariña son consuegros y artesanos y ambos tienen 70 años de edad. Vinculados al barrio de Maneje, decidieron, hace ya más de cinco lustros, elegir algunos de los símbolos más representativos de Arrecife y empezaron a darles forma: primero fue el Puente de Las Bolas y tras él llegaron el Castillo de San José, la Recova Municipal de los años 40 y la Iglesia de San Ginés cuando sólo tenía dos puertas.