El informe pericial del colectivo de pilotos aportado a la investigación del siniestro del avión de Spanair que se estrelló en Barajas causando la muerte de 154 personas concluye con que la aeronave siniestrada vulneraba la seguridad. El citado documento, que se acaba de remitir al juez que instruye la causa, advierte que "en lo referente al diseño del MD-82 se vulneraban requisitos esenciales de seguridad". Es más, en el informe desvelado esta semana por el periódico El Mundo, se expone que en el avión del fatídico vuelo JK 5022 su fabricante, McDonnell Douglas, no instaló la luz de aviso del fallo en el sistema central de avisos acústicos y del que forma parte el sistema sonoro TOWS que no funcionó ese día del accidente para informar al comandante que la configuración de las alas no era la adecuada.

El documento remitido por los pilotos culpa además a las autoridades aeronáuticas, la Dirección General de Aviación Civil dependiente del Ministerio de Fomento, de "deficiencias" en los manuales de mantenimiento y de operaciones de los empleados por los técnicos y pilotos. Denuncian además una "falta de análisis de la avería" y la consecuente aplicación de "un procedimiento equivocado".

Familiares

El informe pericial aportado por el colectivo de pilotos viene aconfirmar que el accidente de Barajas fue "una cadena de errores en la que tienen responsabilidades empresas y administraciones", señaló ayer Zaila Rodríguez, una de las representantes de los familiares y afectados del trágico vuelo JK 5022. Rodríguez indicó que tras este documento quedan por remitir otros dos informes más importantes, que son los correspondientes a la comisión de investigación promovida por el Ministerio de Fomento así como el que tienen que emitir un grupo de peritos contratados por el propio juez y que se estima como el más independiente. Los familiares esperan que estos documentos lleguen a tiempo para que el juicio se inicie en junio.