El exalcalde de Las Palmas de Gran Canaria Jerónimo Saavedra reconoció ayer que se morderá "mucho la lengua" para no hacer declaraciones políticas si finalmente resulta designado Diputado del Común en Canarias. Confesó que le da "pena" haber firmado su baja -lo hizo ayer- en el PSOE para optar formalmente a este cargo. Argumentó que "40 años de militancia no se borran de un plumazo".

CC y PSC le han propuesto para dicha responsabilidad para la que se prevé que sea nombrado en el pleno del Parlamento regional de finales de este mes. El Diputado del Común es la institución equivalente al Defensor del Pueblo en Canarias y darse de baja de la militancia de un partido "es un requisito establecido por ley", alegó.

Saavedra explicó que en la misiva dirigida al PSC-PSOE para comunicar su marcha recurrió a la "tan manida frase" de que lo hace "por imperativo legal". "No he argumentado otra cosa. Lo exige la Ley", apuntó Saavedra, quien admitió que le "duele" abandonar formalmente el partido político en el que ha desarrollado su dilatada carrera política, en la que ha sido diputado socialista por Las Palmas en las primeras cortes constituyentes (1977), presidente del Gobierno de Canarias de 1983 a 1987 y de 1991 a 1993, ministro en dos ocasiones con Felipe González, y alcalde de Las Palmas de Gran Canaria en el pasado mandato.

Saavedra alegó que "hay que cumplir con las leyes" para optar a Diputado del Común, tal y como han hecho compañeros suyos "con más larga trayectoria en el partido", como Enrique Mújica. Incidió en que el puesto exige ser "absolutamente independiente". De hecho, ya rechaza cualquier pregunta que "suponga una evaluación política". Pretende acercar la institución a los ciudadanos y defender sus demandas ante "cualquier administración". A sus 75 años, afirma que ésta es la "última etapa" de su vida política. Si bien aún no conoce al detalle los presupuestos del órgano, prevé "ahorrar" con la supresión del piso alquilado en La Palma para residencia del Diputado del Común, porque él tiene una casa en esa isla. También se revisarán los alquileres de algunas sedes.