R. Acosta

Los colegios de farmacéuticos canarios negocian ya con los bancos una fórmula de financiación para las farmacias una vez que el Gobierno ha reconocido la deuda a través de un documento, petición que el sector venía solicitando desde hace dos semanas a la Consejería de Sanidad. Para hoy se ha convocado de nuevo a los titulares de las oficinas de farmacia a una asamblea para explicar la propuesta del Ejecutivo y aprobar esta vía de solución.

Sanidad adeuda a día de hoy a las farmacias unos 80 millones de euros, correspondientes a los meses de septiembre y octubre. En las últimas dos semanas el enfrentamiento entre el sector y el Ejecutivo ha sido la tónica dominante, ya que Sanidad se ha demorado en exceso a la hora de avalar la deuda ante los bancos y los farmacéuticos han advertido que no cuentan con liquidez y han puesto sobre la mesa el riesgo de desabastecimiento de algunas medicinas.

Después de los tiras y aflojas de los últimos días, los dos colegios canarios cuentan con el documento de reconocimiento de deuda, el principal requisito exigido por la banca para alcanzar una fórmula financiera por la cual las entidades facilitarán los créditos que demanden las farmacias para pagar los fármacos a los distribuidores y los salarios a los trabajadores. Alrededor del 80% de los ingresos de una oficina de farmacia proceden de la Administración a través de la factura de los medicamentos.

El documento del Ejecutivo implica un calendario de pago por el cual Sanidad se compromete con la banca a abonar los fondos adeudados al sector farmacéutico en varios plazos a partir de enero, una vez entre en vigor el presupuesto de 2012.

Intereses

El principal escollo que aún queda por negociar es el pago de los intereses que genera la operación financiera. Según fuentes del sector, Sanidad ha evitado cualquier compromiso a la hora de asumir los intereses y aún no se ha entrado a negociar este asunto.

Sin embargo, el sector advierte que no está dispuesto a sufragar unos gastos que no han originado los farmacéuticos sino el Gobierno, que es el que se ha retrasado en los pagos y está incumpliendo sus obligaciones por reducir casi un 40% el gasto farmacéutico este año.