"No me gusta, pero es lo que toca en la tarea del Gobierno por reducir el déficit". Así explicó y justificó ayer José Manuel Soria el recorte que se aplicará al área de turismo dentro de su departamento en los presupuestos del Estado de este año. Será cercano al 26 por ciento (25,8) y supondrá una merma de 150 millones respecto al presupuesto de 2011, lo que dejará la cifra total de las cuentas públicas en esta materia para este año en el entorno de los 450 millones de euros. El ministro aseguró que este ajuste no supondrá un abandono de las promociones turísticas en el exterior, ni de las medidas para mejorar los entornos de los destinos maduros.

Soria dijo que el ministerio dará continuidad a las campañas internacionales en mercados emisores tradicionales como Alemania y el Reino Unido, pero también en los nuevos mercados correspondientes a las economías emergentes, entre las que citó a Rusia, cuya creciente clase media "consume mucho turismo".

Visados

Para fortalecer el destino español en estos mercados, el ministerio ha emprendido junto al ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación una campaña para flexibilizar el proceso de concesión de visados a los turistas de esos países. Soria insistió en que la hoja de ruta marcada a través del Plan Nacional de Turismo que el Ejecutivo está elaborando "hará hincapié en el valor de la 'marca España" y que esta estrategia "no está reñida con que cada territorio haga promoción de las fortalezas que lo definen".

El ministro valoró muy positivamente la desconvocatoria de las 24 jornadas de huelga por parte de los pilotos de Iberia y expresó su confianza en que "más pronto que tarde puedan llegar a un acuerdo gracias al arbitraje" al que han apelado las partes en conflicto en la compañía.