El Gobierno de Irán cerró con el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Juan José Cardona, y el subdelegado del Gobierno, Luis Molina, un encuentro con el presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, que tenía también proyectado un recorrido turístico por el casco antiguo de Vegueta con motivo de su escala técnica en Gando, a su regreso de Nueva York, donde participó en la asamblea general de la ONU. Sin embargo los planes del líder iraní de pisar territorio español y recorrer la capital de la Isla, como informó ayer LA PROVINCIA/Diario de Las Palmas, se frustraron por la estricta imposición del Gobierno español, que exigía un visado para que Ahmadineyad y la delegación que le acompaña pudieran pisar suelo grancanario.

El riguroso control exigido al presidente de Irán para poder entrar en territorio español no suele ser frecuente en el trato dispensado por Exteriores a las autoridades y presidentes de los Gobiernos de países aliados cuando desean hacer una visita privada u oficial a España. Consciente del conflicto diplomático que ocasionaría a España la visita oficial del Ahmadineyad a Gran Canaria, en especial con Estados Unidos, desde el Ministerio de Asuntos Exteriores se fue en especial riguroso en la tramitación de los permisos para que se produjera la entrada en el país del líder iraní y sus acompañantes.

El Ministro de Industria, José Manuel Soria, comentó ayer en Maspalomas, durante el Día Mundial del Turismo, que la embajada iraní después de iniciar los trámites para desarrollar un recorrido turístico por la Isla "no solicitó el visado necesario para ello".

La explicación de Soria fue precisada por Cecilia Yuste, portavoz de la Oficina de Información Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores de España, que declaró ayer a LA PROVINCIA/DLP que el Gobierno de España "no ha negado nada" a Ahmadineyad. "Hemos hecho exactamente lo que nos han solicitado, han preferido una breve escala técnica. No hay ningún problema, si lo hubieran pedido habrían hecho la visita", recalcó Yuste.

Las aclaraciones de Exteriores no coinciden con los planes iniciales de Ahmadineyad que no sólo tenía prevista una visita turística por la ciudad, un encuentro con Cardona y con el subdelegado del Gobierno, sino una reunión empresarial. Desde la embajada de Irán en España, para evitar un conflicto diplomático, se utiliza un tono moderado y discreto sobre la frustrada visita del presidente Ahmadineyad a la Isla. "Hemos cancelado la visita", comentó sin más precisiones un portavoz de la legación iraní en Madrid, que atribuye a los cambios de agenda y a los desajustes horarios la suspensión a última hora de la entrada del líder iraní a Gran Canaria.

El aterrizaje del avión con el presidente de Irán estaba programado en Gando cerca de las dos de la madrugada de hoy. Ahmadineyad tenía previsto, durante la escala técnica en el aeropuerto de Gran Canaria, recibir a un grupo de compatriotas encabezados por su embajador en España. Sin embargo, los planes iniciales del Gobierno de Irán eran más ambiciosos. Se había preparado una excursión por la Isla que se iniciaba a las 9 de la mañana en Vegueta y terminaba en el aeropuerto seis horas después. No faltaba en el programa el Museo Néstor y Bandama, entre otros lugares turísticos de Gran Canaria. Tras las explicaciones del ministro Soria sobre la necesidad de disponer de visado para entrar en territorio español, el embajador iraní en Madrid, el doctor Morteza Saffary declaró que el titular de Industria "no es el competente para este asunto". "El Ministro de Exteriores ha negado que se nos impidiera la visita. Hay corrientes políticas que están interesadas en buscar problemas entre los dos países", recalcó el embajador iraní. Saffary declaró que en las relaciones de su país con el Gobierno de España "no hay ningún problema". Pero, a su juicio, "hay alguien que quiere estropearlo. Tenemos una buena relación con España".

Ahmadineyad dejó el jueves Nueva York con destino a Gran Canaria tras pronunciar un discurso en la 67 asamblea general de las Naciones Unidos, una intervención que no quisieron escuchar las delegaciones de Estados Unidos, Israel y Canadá, que se ausentaron del plenario cuando le tocó el turno de intervención al presidente de Irán.

Esta no es la primera vez que el líder iraní intenta aprovechar una escala técnica en Gando para visitar la Isla. Hace menos de un año Mahmud Ahmadineyad trató también de visitar la ciudad y recorrer la playa de las Canteras, en pleno conflicto prebélico con Israel, y aprovechando un viaje oficial a Venezuela, pretensión que también fue evitada por el Gobierno de español.