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La bandera del Sahara ondea en la Casa Palacio

Mohamed Sidatti confía en un desbloqueo tras la visita de Ban Ki-moon

El Cabildo de Gran Canaria reiteró ayer su apoyo al pueblo saharaui con el izado de la bandera de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en la fachada de la Casa Palacio y aprueba hoy viernes una moción en la que reclama la celebración del referéndum de autodeterminación, muestra su preocupación por la violación de los derechos humanos en los territorios ocupados por Marruecos y hace un llamamiento a los gobiernos de España y de Canarias para que incrementen la ayuda humanitaria en los campamentos de refugiados de Tinduf.

Tras recibir al ministro para Europa de la RASD, Mohamed Sidati, el presidente Antonio Morales y todos los miembros del grupo de gobierno del Cabildo participaron en el izado de la bandera y en la lectura de un manifiesto para reiterar el apoyo a la causa saharaui, un acto al que también asistieron alcaldes, parlamentarios, representantes de ONG y miembros de la colonia saharaui residente en la Isla.

El Cabildo grancanario es la primera institución del Archipiélago que hace ondear en su sede la bandera del Frente Polisario, dentro de los actos programados para conmemorar el 40 aniversario de la proclamación de RASD, según resaltó el presidente Antonio Morales, quien transmitió al ministro Mohamed Sidati "el compromiso del Cabildo en defensa del pueblo saharaui en su lucha por la libertad, la paz y el respeto a los derechos humanos".

El ministro Mohamed Sidati, en su discurso de agradecimiento, denunció que el Sahara "es víctima de una agresión por parte de Marruecos" y recordó que los habitantes de la antigua colonia española "luchan desde hace 40 años por una solución justa y sobre la base del derecho a la autodeterminación y a la independencia".

"La RASD significa la resistencia a esa represión y seguiremos luchando por los valores de la libertad, la justicia, la paz y los derechos humanos, que son tan importantes para nosotros como el aire que respiramos", aseguró Sidati, quien consideró que el izado de la bandera en una institución tan representativa como el Cabildo "es un mensaje claro" de que los canarios son siempre solidarios. "Los lazos de amistad y de afecto de nuestros pueblos no son de ayer; y expresamos desde aquí nuestra voluntad de desarrollar esas relaciones en el presente y en el futuro", apuntó.

Estancamiento

Sidati dijo que la situación del Sáhara está actualmente "estancada" y culpó de ello al Reino de Marruecos, que suspendió de forma unilateral las negociaciones y "bloquea los esfuerzos" de la ONU. Respecto a la próxima visita del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, a los campamentos de refugiados de Tinduf, adelantó que la RASD le planteará fórmulas para obligar a Marruecos a cumplir los acuerdos internacionales.

El ministro para Europa explicó de que en el último congreso del Frente Polisario "quedó claro" que existen dos caminos para resolver el conflicto: la paz, por la que se ha apostado en los últimos años; o la reanudación de la lucha armada, que no se descarta. "Los saharauis están dispuesto a seguir luchando con todos los medios legítimos para lograr los objetivos de libertad e independencia", advirtió.

La colocación de la bandera del Sahara en la Casa Palacio de la calle Bravo Murillo, como anteriormente se hizo con las de Palestina o la insignia arco iris del movimiento LGTB, forma parte de los actos organizados por el Cabildo y la Asociación Canaria de Solidaridad con el Pueblo Saharaui. Estos gestos simbólicos por el 40 aniversario se repetirán en los próximos días en instituciones como los ayuntamientos de Santa Cruz de Tenerife, La Laguna, Santa Lucía de Tirajana o Ingenio.

Al acto de ayer en el Cabildo asistieron, entre otros, los alcaldes de Arucas, Juan Jesús Facundo; de Santa María de Guía, Pedro Rodríguez; y el primer teniente de alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Javier Doreste. También acudió el diputado nacional Pedro Quevedo y representantes de NC, el PSOE y Podemos.

Esos tres grupos presentan hoy en el Pleno del Cabildo una moción "en defensa de los derechos del Pueblo Saharaui" que recoge cinco acuerdos. En el primero se reitera el apoyo de la institución al derecho que tiene reconocido la población del Sahara a la autodeterminación y "a ejercitarlo a través de un referéndum libre, democrático y donde se planteen todas las opciones, tal como reconoce el Derecho Internacional y las reiteradas resoluciones de la ONU".

El conflicto tiene su origen, según la propuesta del gobierno insular, "en un proceso de descolonización que no ha concluido, por lo que cualquier fórmula que no respete este principio se aleja de una solución efectista y realista".

El segundo acuerdo de la moción muestra la preocupación del Cabildo "por la violación de los derechos humanos que se ejerce sobre la población civil en los territorios ocupados del Sáhara Occidental", por lo que insta "el cese inmediato de la represión, la libertad de todos los presos políticos saharauis, el fin del expolio de los recursos naturales y el acceso al territorio de los observadores internacionales". Al respecto, se considera esencial la ampliación del mandato de la Minurso y que la ONU garantice "no solo el alto el fuego, sino que evite la vulneración de los derechos humanos hasta la celebración del referéndum". También se exige la anulación del juicio militar contra los 25 activistas del campamento de Gdaym-Izik, que cumplen penas de hasta cadena perpetua en cárceles marroquíes.

En el tercer acuerdo de la moción se hace un llamamiento al Gobierno de España, al Gobierno de Canarias y a todas las instituciones del Archipiélago para incrementar los proyectos de ayuda humanitaria destinados a paliar las graves carencias de productos básicos en los campamentos de refugiados, sobre todo en alimentación, salud, educación, vestido y calzado, agravadas por las recientes inundaciones que han destruido en su totalidad el campamento de Dajla.

Reconocimiento

En el cuarto punto se solicita al Gobierno de España "el reconocimiento efectivo" del Frente Polisario como representante legítimo del pueblo saharaui, tal como lo considera la ONU. Por último, demanda al Gobierno de España "una postura mucho más activa, como antigua potencia colonial, en la defensa de las resoluciones de las Naciones Unidas".

Esta moción, que fue leída ayer en forma de manifiesto por María del Carmen Cabrera, presidenta de la Asociación Canaria de Amigos del Sahara, será aprobada por el pacto tripartito del Cabildo -NC, PSOE y Podemos- y también contará con el apoyo de UGC, el grupo de José Miguel Bravo de Laguna, y por Fernando Bañolas, de CC.

El grupo del PP votará en contra de la moción, según adelantó el portavoz Felipe Afonso El Jáber, quien pidió al presidente de la corporación, Antonio Morales, que "deje de jugar a ser jefecillo de Estado". El PP mostró su rechazo al izado de la bandera en la Casa Palacio.

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