Si CC pensó hace poco más de una semana que podría convertirse en socio preferente de un gobierno presidido por Mariano Rajoy tras haberle ofrecido el apoyo en la primera de las reuniones para su posible investidura, ayer tuvo que poner fin a la ensoñación a la vista de los resultados de la ronda de contactos del líder del PP y ganador de las elecciones del 26-J. Los nacionalistas canarios se han quedado solos en su disponibilidad para mantener a Rajoy en La Moncloa y vuelven a la casilla de salida del proceso. Ocho días después de iniciada la ronda con CC, el candidatable no ha sumado ni un solo posible aliado más y se aboca, si es que llega a concretar esa intención, a una primera investidura frustrada a finales de julio o a un aplazamiento de la misma hasta agosto.

Rajoy cerró ayer con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, la ronda de reuniones para explorar las posiciones de los partidos, y constató que, "a día de hoy", los socialistas dirán "no" a su continuidad en La Moncloa. La posición del PSOE convertía en anecdótico el anuncio pocos minutos antes del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, de que accedería a la abstención de sus 32 diputados en una segunda votación como gesto de responsabilidad para permitir la formación de un gobierno. Sin la abstención del PSOE, la de la formación naranja no resulta operativa.

Dado que todos los demás partidos con los que se reunió en este tiempo Rajoy han dejado clara su oposición a su investidura, sólo CC ha terminado por ser la formación que se ha mostrado proclive al acuerdo a cambio del desarrollo de una amplia agenda de asuntos canarios. Junto al PSOE, tanto el PNV, como los nacionalistas catalanes y obviamente Podemos mantienen su rechazo a Rajoy.

La formación canaria ha querido dejar claro sin embargo que la reunión de la semana pasada de su secretario general, José Miguel Barragán, y del presidente de Canarias, Fernando Clavijo, con Rajoy en La Moncloa no suponía un compromiso de apoyo, sino únicamente su "disposición a hablar y a negociar". También insistieron ayer que no abrirán las negociaciones con el PP para ese posible a apoyo si antes Rajoy no avanza en el mismo sentido con algunos de los partidos necesarios para permitir la investidura, C's y el PSOE. "No somos necesarios para la investidura, y hasta que Rajoy no vaya cerrando acuerdos con otros no vamos a dar ningún paso. No vamos a negociar solos", afirmó tajante la diputada de CC, Ana Oramas.

José Miguel Barragán se expresó en términos parecidos: "CC va a negociar la agenda canaria y va a contribuir a un gobierno si existe gobierno o posibilidad real de alcanzarlo, no si se mantiene el bloqueo actual. Ya intentamos hacer un esfuerzo la vez anterior con la investidura de Sánchez, pero ahora el esfuerzo de uno solo es estéril", dice el dirigente nacionalista.

Barragán rechaza que CC haya expresado en ningún momento su apoyo al PP, sino únicamente su "disponibilidad a hablar y a negociar".

Pese a la negativa de ayer del PSOE a permitir con su abstención la investidura de Rajoy, Oramas ve improbable un bloqueo definitivo que conduzca a nuevas elecciones. Considera que con la retirada del veto de C's a Rajoy y con algunos de los elementos expuestos por Sánchez, "empieza a haber movimientos" que pueden encaminar a una investidura del líder del PP, aunque según ella muy probablemente no antes de las elecciones en el País Vasco (previstas para después del verano). Oramas cree que Sánchez matizó ayer su rechazo de fondo al candidato popular al asegurar que esa era su posición "a día de hoy", y al recalcar la importancia que tienen "los plazos y los tiempos políticos" en este tipo de procesos y que el PSOE, según Sánchez, "estará en la solución" y que "hará todo lo posible para evitar nuevas elecciones".

Cree que cuando Sánchez ha instado a Rajoy a trabajar para salvar la distancia entre sus actuales 137 diputados y los 176 que necesita para la investidura, está sugiriendo que el PSOE se abstendrá si el candidato se encuentra a "uno o dos escaños de esa mayoría necesaria". En todo caso, insiste en su teoría de que "no parece que haya una investidura rápida".

Barragán, por su lado, no descartaba ese mismo escenario pero ayer veía con "pesimismo" la situación creada hasta el punto de considerar que "hoy por hoy, estamos más cerca de unas nuevas elecciones que la semana pasada". "Estamos en una posición muy similar a la del 20-D. Esperamos que los resultados que pueda dar una segunda ronda de negociación por parte del PP pueda mejorar esa expectativa", remarcó el dirigente nacionalista, para quien se podría dar la posibilidad de que si Rajoy no obtiene apoyos, Sánchez podría intentar una nueva oportunidad.

"Estamos más próximos a unas elecciones que a otra cosa. Vamos a seguir así por mucho tiempo, aunque puede ocurrir que el Rey llame a consultas, que nadie tenga claros los apoyos, que ni el líder del PP ni eld el PSOE asuman la responsabilidad y que se abra una nueva ronda de negociaciones y se gane tiempo para que los partidos vayan intentando girar la posición", sostuvo el dirigente nacionalista.