¿Hasta dónde puede llegar esta situación de crispación que enfrenta a los socios de gobierno y a los cabildos entre sí?
Aquí hay un escenario de fondo y es que no sabemos qué interlocutor tiene el PSOE en Canarias porque la batalla interna que se está librando en el Partido Socialista es la que está condicionando casi todo. Hace más de un año empezamos a negociar los cabildos y los ayuntamientos con el Gobierno los criterios de Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan), un logro del presidente del Gobierno de 160 millones de euros al año que ahora se acaba de consolidar. Tras el tiempo transcurrido se ha firmado un modelo con el Gobierno por parte de 84 ayuntamientos y seis de los siete cabildos y sólo hay un voto en contra. Se pretende crear escenarios que son ficticios porque en mi pueblo cuando votan seis y uno vota en contra el que se queda solo acata la mayoría y eso no está ocurriendo. Con respecto al Gobierno, no hubo una sola voz discrepante hasta el último minuto y me parece que eso no es jugar limpio. Lo que es un principio sagrado en democracia es la seguridad jurídica y lo que no se puede pretender es cambiar las reglas del juego en medio del partido. Espero que las fuerzas políticas que no están de acuerdo con lo que se ha hecho expliquen con claridad a los ciudadanos de Fuerteventura porqué les quieren quitar este dinero.
¿El debate es realmente el traslado de la triple paridad electoral al reparto de recursos económicos? ¿Usted respalda esta fórmula?
Defendemos claramente la triple paridad pero de lo que estamos hablando es de una distribución que debe ser equilibrada entre territorio y población y aquí se cumple. Estamos hablando de únicamente 160 millones frente a los miles de millones que se reparten con el criterio de la población, por lo que se trata de otras batallas políticas que algunos pretende dirimir en un escenario que no tiene nada que ver con estos fondos, sino con crisis internas. Los cabildos y ayuntamientos nos hemos preocupado de elaborar programas pensados para impulsar la economía local e insular con modelos propios para cada isla. Hemos adquirido el derecho a recibir unas cantidades y vienen algunos hablando de insularismo ramplón, se trata de una falta de respeto al trabajo realizado y a las instituciones. Pedimos respeto ante un trabajo hecho con rigor frente a unas afirmaciones que son puro politiqueo.
¿Y entonces porqué cabildos como el de Fuerteventura se oponen al reparto del eje de empleo del Fdcan si está todo negociado y pactado?
El eje de empleo también se iba a distribuir de la misma forma que el de I+D y el de las infraestructuras pero la Consejería de Empleo se quiere quedar con el dinero para seguir haciendo más de lo mismo. Nadie le ha discutido nunca al Servicio Canario de Empleo los miles de millones que le llegan para políticas activas de empleo, lo que decimos los cabildos es que estos 160 millones se dejen para realizar actuaciones desde lo insular adaptadas a las necesidades de cada territorio. Los siete cabildos, incluido Gran Canaria, hemos recurrido y si no iremos a un contencioso para que se nos otorgue estos fondos como planteaba la convocatoria. De lo que se trata es de darle coherencia al Fdcan.
¿CC ha cedido en los fondos destinados a empleo frente a los otros dos ejes?
No se trata de ceder sino que en el comité de selección se aprobó que la Comunidad Autónoma se quedaba con los fondos y así se llevó al Consejo de Gobierno.
Sin embargo, empresarios y sindicatos respaldan que el Gobierno centralice estos fondos para evaluarlos mejor.
La Fecai propone que esa evaluación se haga en las comisiones insulares de empleo que están creadas desde hace años. Creemos que se trata de un espacio establecido para ese tipo de evaluación si así se quiere garantizar la coherencia regional de los proyectos. La convocatoria lo que plantea son siete políticas de empleo y por eso tenemos derecho a ese dinero. Si el Gobierno no acepta nuestro recurso iremos al contencioso.
¿Cree que los cuatro partidos que se han opuesto al Fdcan en Gran Canaria pueden cambiar en el Parlamento los criterios aprobados por el Gobierno?
Se trata de un asunto planteado en Gran Canaria y no hay unanimidad en algunos partidos al respecto. De Nueva Canarias ya sabemos a lo que juega; el PSOE firma en una isla una cosa y en Gran Canaria otra porque en cuatro islas apuesta descaradamente por el Fdcan; en el PP tengo entendido que tampoco hay unanimidad. Insisto que el Gobierno aprobó por unanimidad este asunto, por lo que tiene que rematar la faena.
Sin embargo, estos partidos afirman que la voluntad popular reside en el Parlamento y no en los cabildos ¿lo cree así?
En el ámbito de competencias de cada uno representa tanto la voluntad popular el Parlamento como los cabildos y los ayuntamientos. Vuelvo a lo mismo ¿con qué PSOE hablamos? Aunque haya gestora sigue sin existir un interlocutor claro y da la sensación de que esta batalla no ha hecho más que empezar. No pueden hacer pagar a las instituciones y a la población las desavenencias internas que puedan tener y en las que no entro.
¿Cómo analiza esta crispación política en relación con otras que han habido en etapas anteriores?
La crisis en sí misma no tiene porqué ser un elemento negativo si es para un cambio a mejor. Ahora bien, es cierto que esta situación no puede continuar porque el espectáculo no es positivo para la Comunidad y porque el enfoque no está centrado en la gestión sino en la pelea y la confrontación. El problema es que las causas son varias, pero las principales son políticas y se están jugando otros asuntos en el terreno de la acción del Gobierno.
¿La salida es la ruptura y un cambio de pacto?
Lo que sucedió en la mesa de seguimiento del lunes no puede ser más claro porque seguimos unidos pero en la desconfianza. De esta manera el pacto no puede continuar ya que se ha instalado la desconfianza y así no se puede gobernar. Se puede aguantar unas cuantas semanas y mal pero toda la legislatura ni de coña, así hay que reconocerlo y el que no lo quiera ver no está en la realidad.
¿Cree que CC o PSOE están buscando alternativas?
Después de lo que ha dicho el portavoz del PSOE tras la reunión del lunes aquí no cabemos los dos porque está descalificando al presidente con el que gobierna. En estas condiciones lo que quieren los socialistas es guardar las apariencias, cosa que ya nadie se cree, pero esto está roto. El Gobierno está fracturado y eso no lo duda nadie.
¿Desde CC de Fuerteventura se apoyará un cambio de socio en el Gobierno llegado el caso?
Reitero lo mismo que mantiene el partido, es decir, este es el mejor pacto para Canarias pero debo reconocer que en las últimas semanas el PSOE se empeña en ponerlo imposible, por lo que espero que corrija esta deriva. Coalición Canaria cree en este pacto pero se está quedando sin pareja de baile porque la otra parte está escenificando en temas tan importantes como el Fdcan cuestiones políticas de carácter interno. La vicepresidenta está siendo desleal con sus socios de gobierno.
¿Teme que el PSOE esté intentando desalojar a CC del Gobierno con otros partidos?
Lo que tengo claro es que CC está intentando actuar con coherencia en temas tan importantes como la Ley del Suelo y el Fdcan. Hemos dicho por activa y por pasiva que quiere ratificar este pacto pero nos encontramos con que el PSOE insiste en que este pacto está roto, a pesar de que es el que está rompiendo a diario las reglas del juego.
¿Esta encrucijada pone en riesgo los presupuestos de 2017 y la Ley del Suelo?
Las áreas que gestiona el PSOE cuentan con cerca del 70% del presupuesto, por lo que no hay motivos para que los socialistas discrepen de un presupuesto en el que está muy bien tratado. En relación con la Ley del Suelo sólo algunos sectores del Partido Socialista manifiestan discrepancias y no por los municipios y cabildos donde gobiernan. La única puntualización es incorporar un órgano de ámbito canario que ponga su mano en las grandes decisiones y eso parece que está ga- rantizado, por lo demás la Ley del Suelo es de CC y del PSOE, por lo que no hay ningún motivo racional para que los socialistas estén en contra de una ley que es suya también. Si ponen obstáculos a alguno de estos dos asuntos será por razones que, una vez más, no tienen nada que ver con la acción de gobierno, será más por razones de carácter político y partidista.
