La criba de avales a los tres precandidatos a la secretaría general del Partido Socialista Canario (PSC-PSOE) se dilató ayer más de lo esperado pero no alteró, al menos no considerablemente, el inicial reparto de fuerzas. El secretario de la organización socialista en Gran Canaria y vicepresidente del Cabildo insular, Ángel Víctor Torres, se mantiene así en la primera posición de la carrera por el liderazgo orgánico del PSC-PSOE con 245 firmas favorables más que Patricia Hernández y hasta 903 más que Juan Fernando López Aguilar. No en vano, y a pesar de las dificultades de las candidaturas para acceder a los datos exactos de los apoyos recabados por cada una de las tres opciones en cada una de las islas, en el equipo de Torres dan por descontada su victoria -de momento solo en avales- en Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura, es decir, en las tres islas de la provincia de Las Palmas. Es más, el análisis de las cifras definitivas dibuja un escenario en el que el candidato grancanario logra arañar más apoyos fuera de su isla que los de Hernández, su principal rival, fuera de la suya (Tenerife).
Lo que dicen los datos oficiales y definitivos es que los 2.128 avales presentados por Torres en la tarde del jueves se quedaron finalmente, una vez eliminados los que no cumplían todos los requisitos, en 1.948. Por su parte, la exvicepresidenta del Gobierno autonómico había presentado 1.820 firmas y al final se le contabilizaron 1.703, mientras que López Aguilar llevó ante la mesa de validación un total de 1.205 que se vieron reducidas a 1.045. A partir de aquí, los equipos de cada candidatura echaron mano de calculadora para trazar el mapa de fuerzas insular.
El programa informático empleado para el recuento de avales es tan básico que apenas permite confirmar que efectivamente el militante es militante y que su firma no está repetida. En otras palabras: no facilita la tarea de elaborar las estadísticas por islas, lo que ayer lamentaban desde los equipos de las distintas candidaturas, que no podían cotejar sus cifras con las de los otros dos aspirantes y que tenían que conformarse con una aproximación del mapa definitivo de los apoyos. Con todo, los distintos equipos de los ya candidatos -a falta de que termine el preceptivo plazo de alegaciones o reclamaciones, que concluirá este próximo lunes y que dará paso al período de campaña- manejan varias certezas. Por un lado, en la candidatura de Ángel Víctor Torres dan por descontada su victoria en las tres islas orientales y están convencidos de haber arañado más votos en Tenerife que Patricia Hernández en Gran Canaria; por otro, en el equipo de la que fuera consejera autonómica de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda existe el convencimiento de que muchos de los avales conseguidos por Torres en Gran Canaria son avales cautivos, es decir, avales dispensados por obediencia al secretario insular que llegado el momento del voto -ya secreto- no se traducirán en papeletas.
Fuentes próximas a la candidatura de Torres hicieron hincapié en que el vicepresidente del Cabildo haya sido capaz de sumar 245 avales más que Hernández cuando en su isla, Gran Canaria, el número de militantes, 1.800, es sensiblemente inferior al de Tenerife, la isla de Hernández, donde los afiliados suman 2.600. En definitiva, dos son las certezas que manejan los afines al secretario del PSC-PSOE en la isla redonda: que han recabado más apoyos que ninguno en Gran Canaria, Lanzarote y Fuerteventura y que necesariamente han arañado más firmas en la isla del Teide que Hernández en Gran Canaria. Hay que puntualizar, eso sí, que el voto en Tenerife se ha visto dividido por la presencia en el escenario de Juan Fernando López Aguilar, quien cuenta con un considerable predicamento en determinadas agrupaciones locales.
Por su parte, fuentes próximas al equipo de Hernández -que volvieron a negar la posibilidad de que Aguilar termine integrándose en su candidatura- expresaron su seguridad en que en las Islas ocurrirá lo mismo que ya ocurrió en la pugna entre Susana Díaz y Pedro Sánchez por las riendas de Ferraz. Díaz obtuvo en su momento 6.000 avales más que el a la postre vencedor Sánchez. En la candidatura de la exsenadora y excongresista tienen la certeza de contar con más apoyo en Gran Canaria de lo que dicen los avales. "Una cosa es avalar y otra, votar", avisan.
