Seis maestros de la dirección orquestal serán los conductores de otras tantas formaciones sinfónicas sobre las que el XXVI Festival de Música de Canarias vertebra su programación desde el próximo 8 de enero. La excepcionalidad y la proyección mediática tienen a dos grandes protagonistas: la experiencia y sobrada veteranía en todas las plazas posibles que representa el director de origen indio Zubin Mehta, frente a jóvenes de meteórica carrera que dirigen con una pasión arrebatadora y contagiosa, como es el venezolano Gustavo Dudamel. Frente a ellos, los rusos Vladimir Jurowsky y Mikhail Pletnev, figuras de peso en los circuitos internacionales, y los directores titulares y artísticos de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria y Orquesta Sinfónica de Tenerife, el madrileño Pedro Halffter y el chino Lü Jia.

Junto a las formaciones canarias, a las que el Festival les ha asignado un solo programa en esta edición, otras cuatro grandes orquestas como la Estatal de Dresde (Staatskapelle Dresden), la más antigua del mundo, fundada en 1548, y que tendrá como conductor a Zubin Metha en la inauguración; la Sinfónica de Gotemburgo, que repite en el Festival canario ahora con Gustavo Dudamel, formación de la que es director musical desde la temporada 2007/2008 y hasta 2012, responsabilidad ésta que el venezolano comparte con la Filarmónica de Los Ángeles, desde este año, y con la Orquesta Sinfónica de la Juventud Venezolana Simón Bolívar, formación que conduce hace más de una década, y cuyo trabajo le valió el Príncipe de Asturias de las Artes en 2008; y los maestros rusos Vladimir Jurowsky, que dirigirá a la Filarmónica de Londres, y el director, compositor y pianista Mikhail Pletnev, a quien se le reservan los dos últimos conciertos con la Orquesta Nacional Rusa, y dos programas con Shostakovich (se han programado las sinfonías 4 y 9 con Pletnev; y la Sinfonía 4 y Cinco fragmentos op. 42, con Jurowsky y la Filarmónica londinense), Rachmaninov, Golovanov y Taneyev.

Prokofiev y su cuarta sinfonía, el Concierto para piano nº 3, de Beethoven, y el estreno de Turnage, quedan en manos de Vladimir Jurowsky.

La inauguración será con Mehta, el más veterano de cuantos se subirán al podio, con la Orquesta de Dresde y el barítono Thomas Quasthoff, y un programa sobre Weber y sus Seis piezas para orquesta; las Kindertotenlieder (Canciones para la muerte de los niños), de Mahler, el ciclo de canciones sobre los poemas de Rücket; y el poema sinfónico Así habló Zaratustra, de Strauss. El segundo envite de Mehta será un monográfico sobre Brahms con la Obertura trágica, Variaciones sobre un tema de Haydn, y la Sinfonía nº 4.