El primer casco del Santa Catalina se construyó en el año 1934 como sus coetáneos de la época, Porteño, Minerva y Tomás Morales. Su constructor fue el carpintero de ribera Maestro José González y navegó hasta que se prohibió competir en aguas de la bahía con motivo de la Guerra Civil española.

En esta primera etapa destacan a la caña los patrones Vicente Quevedo, Domingo Oramas y el ´viejo´ Piteras, patrones y casco que lograron triunfos y lucimiento para la alegría y júbilo de sus muchos seguidores de entonces.

Una embarcación que fue mimada por la consignataria ´Juan Bordes Claverie´ y sus empleados, que contaron con la colaboración de la Casa Miller, que cedía su muelle carbonero para los trabajos previos y al final de cada regata. Este casco dejó de navegar en el año 1960, se varó en unos almacenes y se desconoció su destino. Se dice que lo robaron, pero el viejo Santa Catalina nunca volvió a navegar.

El segundo casco, construido por Domingo Ruano, llega con el resurgir de la vela latina a comienzo de los años sesenta. En esta ocasión fue conocido con el sobrenombre de ´La Palangana´ a consecuencia de un error de cálculo en las medidas de su eslora por lo que tuvo que recortarse la proa para poder competir en condiciones.

Pero eso no bastó. El descontento de los catalinistas era grande debido a su pobre rendimiento y por eso se decidió a mediados del año 1964 acometer la construcción del tercer bote, esta vez encargado al carpintero Juan del Pino.

Este nuevo Santa Catalina dio signos de que podía dar grandes alegrías a sus seguidores en los años sucesivos. Una afición que no se perdía ni un sólo detalle de su elegante navegar en los clásicos enclaves del campo de regatas.

Muchos han sido los presidentes que han pasado por el Santa Catalina, club que ha tenido varias sedes: Cristóbal Ramos, Gregorio, Pepín Méndez, Rafael Guerra, Rafael Martín, Juan Brito y Miguel Suárez, entre otros...

El recordado Tomás Machín

En esta etapa de éxito, el Santa Catalina contó a la caña con los conocimientos del mar y los vientos del recordado y admirado Tomás Machín ´El Majorero´, patrón que le supo sacar el máximo rendimiento al Santa Catalina y con el que logra el Eliminatorio (1967) y el Provincial (1973) con Lacho, Wenceslao, Vicente, Valido Rafa Martín, : Manolo el Rubio, Luis Medina, Jorge y Juan Brito, Carmelo y Tomás Machín de patrón.

El quinto casco sale del taller de Maestro Eusebio Díaz (1983). Fue un bote puntero, pero los resultados no fueron mejores al coincidir con el Astican, Tomás Morales, San Cristóbal y con un solido Porteño. Con la construcción del sexto casco se registra una de las mejores etapas del club. Quevedo, Bernal, Santi Ceballos (subcampeón del Provincial y del Eliminatorio, y campeón del Trofeo Federación (1994) y campeón Provincial, (1995) y José M. Cantero, campeón Provincial, (1996). Estos éxitos los consigue el Catalina con una gran tripulación y la presidencia de José Méndez de Armas.

A partir de estos últimos éxitos, los catalinistas retornan a la escasez de triunfos. Son años pésimos e incluso el año 2008 el bote no sale. Porsteriormente llega savia nueva (Guti del Castillo, Timo, Adrián Cruz...) al recién construido casco, que es el séptimo, de la mano de Juan A. Martín. Antes, habían utilizado para poder competir el casco del Alcaravaneras.

En el 2009 llega el veterano Luis Martínez, que hace de todo. Regresa por iniciativa de los catalinistas y con un grupo de expertos tripulantes y con sus hijos Jorge, Cristina y Gustavo Martínez.

Ahora para Luis Martínez la temporada se presenta "con muchos ánimos, buenas sensaciones y como objetivo participar pese a la escasez de medios".

Próxima entrega: Unión Risco