0-3, el primer naufragio en la 'era Herrera'. De tener el partido en la mano, tras dos palos, a una derrota estrepitosa. ¿Cómo justifica la caída ante el Betis?
Tampoco hay que volverse locos, ahora uno está fastidiado y jodido pero nos hemos levantado de situaciones peores. Y este equipo va a seguir trabajando, hay que quedarse con lo positivo. Este vestuario se levantará. No hay dudas.
¿Qué destaca del equipo?
Hicimos una gran primera parte y merecimos marcar más de un gol cerca del descanso. El primero del Betis fue un mazazo durísimo. No podemos caer en eso -en referencia al dramatismo tras la derrota- porque no es bueno.
Su técnico Paco Herrera dijo en sala de prensa que habían "arrojado la toalla" y que era la primera vez que agachaban la cabeza. ¿Por qué sucedió?
Desde fuera, tras mi sustitución -minuto 68 y con 0-1 en el marcador-, la sensación que te da es la de estar indefensos. Ese tanto [el 0-1 de Jorge Molina] nos hizo un daño muy excesivo. A veces no estás entonado, recibes un gol y te vale para espabilar. Pero en nuestro caso, estábamos bien y el 0-1 nos hizo un daño terrible. No se puede repetir y hay que ser fuertes, y saber que ante este tipo de situaciones tenemos que levantarnos. Estoy seguro y convencido de que nos vamos a levantar. Hemos salido de situaciones mucho peores. Al final y al cabo estamos a un partido de la zona alta. No hay que volverse locos.
¿El 15-M ante el conjunto de Mel fue como un 22-J pero en formato 'mini'? ¿Dejará secuelas?
Insisto que tampoco hay que volverse locos, es solo un partido más de Liga. Es cierto que era importante porque nos visitaba el segundo y estaba en juego el liderato. Pero perdimos. Y tampoco es que el Betis tuviese una infinidad de ocasiones; tuvieron tres o cuatro y las aprovecharon. Fueron efectivos. Sin embargo, nosotros tuvimos tres y llegaron los palos. No es el momento de perder el norte y volverse locos. Hay que corregir los errores que tuvimos en la segunda parte y poco más.
Deja atrás un infierno de tres jornadas sin minutos -suplente ante Racing y Tenerife, descartado ante el Alcorcón en Santo Domingo-. Su rostro es esfumó tras la derrota en el Ángel Carro de Lugo pero ahora encadena dos partidos en el once [ante el Sporting (68') y el cuadro bético (69')]. ¿Qué balance hace de esos 137'? ¿Le puede perjudicar la falta de triunfos?
Estoy contento con mi rendimiento. Hice una buenísima primera parte; tuve una ocasión con un remate con el tacón que tapó el portero del Betis -Adán-. El míster -Paco Herrera- me pidió que cayese a la banda izquierda. Se trata de una posición nueva pero considero que estuve bien. Todo queda empañado por el resultado. Pero confío en mí y en mis condiciones, y espero ser importante de aquí al final de la Liga para la UD.
La 29ª jornada dejó una imagen polémica en el Gran Canaria. En el minuto 76, tras el tercero de Ceballos, y ante la sangría, centenares de fieles amarillos abandonaron su asiento. ¿Los que se marcharon representan a la afición de la UD?
No hay una vara de medir para calibrar quién es aficionado de la UD y quién no. Todos suman. Le doy las gracias a los que se quedaron hasta el final, hasta el último segundo y apoyaron. A todos. Y no hay que darle más importancia a los que se fueron sino poner el foco en los que se quedaron alentando hasta el final. Para mí, ellos sí son la UD, los que siguieron cantando y animando tras la derrota.
¿Cómo puede afectar perder el liderato, tras 17 jornadas de forma consecutiva gobernando la tabla de Segunda? ¿Puede provocar un daño colateral anímico o físico?
Es un pequeño golpe pero queda un mundo por delante y ellos salen reforzados. El Betis tiene el gol average a favor pero estamos a un partido del primer puesto. Esa es la realidad, y tenemos a dos puntos la zona de ascenso directo. Y aún restan 13 jornadas para el final.
En su diccionario no hay términos como catástrofe o pesadilla tras el varapalo de la última jornada ante los verdiblancos.
Tiene su importancia porque era ante uno de los rivales directos y son duelos claves.Pero nada más. Hasta ahí, ahora vamos a pensar en el próximo partido ante el Numancia en Los Pajaritos -sábado, 19.00 horas- que será una prueba exigente. Receto tranquilidad; el mundo no se acaba aquí. Repito que queda mucha tela por cortar y el equipo se levantará como lo ha hecho de forma ejemplar en situaciones más dramáticas. Ahí está la historia reciente -en referencia al trágico 22-J ante el Córdoba-. Hemos hecho un buen partido, quitando el 0-1 que nos paralizó un poco. Y fue una de las claves.
¿Cómo justifica que la UD, segundo máximo realizador con 46 dianas de la competición, solo haya logrado 7 goles en las últimas 9 jornadas de Liga -una media de 0,7 por partido-?
Se vio ante el Betis. Dos palos, paradones del meta (...) Te vas con un 2-0 y todo cambia. Pero ya pasó. Solo pienso en el Numancia.
