La llamada de la seleccionadora nacional sub'16, la asturiana Toña Is -nombrada a mediados del pasado mes de octubre para las categorías inferiores-, ha llenado de satisfacción a las hermanas grancanarias Marta y Patricia, por cuanto supone "cumplir con parte de un gran sueño".
Marta y Patricia Estupiñán Santana (Gran Canaria, 19/01/2000) comparten algo más que ser mellizas y estar casi que supersincronizadas. Comparten, sobre todo, su gran pasión, que no es otra que el fútbol, "pero con los pies en el suelo, porque del fútbol femenino no se vive ni se podrá vivir", señala Marta, a lo que Patricia añade que "por eso no descuidamos los estudios y lo anteponemos a todo, aunque nos tire muchísimo el fútbol. Pero el futuro está ahí, en los estudios".
Así, Marta se decanta por estudiar "medicina, aunque lo que no tengo muy claro es qué especialidad escoger. Me encanta todo lo referente a la oftalmología, pero también me gusta la odontología. Me tendré que definir". Mientras, Patricia sí que lo tiene muy claro, pues ella ya ha decidido que quiere ser "fisioterapeuta", porque es una profesión que le permitiría seguir ligada al mundo del deporte en general y del fútbol en particular. De momento, ambas estudian cuarto de la ESO en el instituto Sagrada Familia.
Una afición familiar
La llamada del fútbol, un deporte que han vivido "desde chiquitas", les llegó gracias a la gran afición tanto de su hermano mayor, Toni, como de su padre, Miguel, pero comenzaron a dar patadas al balón un tanto de forma más seria en las filas del Unión Viera, aunque finalmente han recalado en las del CD Aguiluchos, dependiente del Femarguín de Arguineguín. "Es un sacrificio llevarlas a entrenar allá abajo, pero se hace con gusto", señala su único hermano, pues la cuarta de la descendencia, la mayor, es otra chica.
El fútbol es, pues, una afición familiar. Tal es así que por ello también son seguidoras del Real Madrid, el equipo de su hermano. Y es que de casta le viene al galgo, porque son primas de David García, el capitán de la UD Las Palmas.
Marta, que actúa preferentemente de central o incluso de mediocentro, señala que "soy más organizadora. Meto pocos goles, casi ninguno, pero lo que me gusta es distribuir el balón, dar asistencias". Así, señala que sus jugadores favoritos son "Iniesta, Modric, Busquets y Sergio Ramos", identificándose sobre el terreno de juego con "Iniesta. Aunque tengo un físico más parecido al de Busquets, juego como Andrés".
"Dicen que muevo bien el balón y por eso me gusta distribuir y asistir a mis compañeras. Me gusta abrir el juego arriba. Coincido poco con mi hermana sobre la cancha, porque tenemos diferentes posiciones, pero alguna que otra asistencia también le doy arriba, para que marque", añade Marta finalmente.
Mientras, Patricia se desenvuelve en posiciones completamente distintas. A ella le gusta más el ataque, y aunque en ocasiones la alinean como mediapunta o mediovolante, lo que en realidad le gusta es desempeñarse en la punta del ataque y culminar las jugadas en gol.
"Soy más un nueve. Ahí es donde me gusta jugar, para estar más cerca del gol", indica Patricia, quien añade que sus jugadores preferidos son "Cristiano Ronaldo, el grancanario Jesé, Luis Suárez y también me gusta el colombiano James", antes de concluir que "me quiero parecer a Cristiano".
En cuanto a las referencias en el fútbol femenino, ambas también tienen sus coincidencias, como buenas mellizas.
Así, por ejemplo, sus ídolos son "la estadounidense Alex Morgan, la brasileña Marta o la española Vero Boquete", aunque luego Patricia añade también a la española "Alexia, delantera que juega en el Barcelona".
Soñar con Estados Unidos
Cuando ambas hermanas se deciden a dejar volar su imaginación, a soñar despiertas, retornan las coincidencias. Las dos tienen muy claro que, de una parte, "nuestro sueño es jugar con la selección española", según señalan con decisión, para añadir Patricia que "pero hay que ir poco a poco, paso a paso. De momento esperamos que esta llamada sea el inicio y debutar con la sub'16, para luego ir subiendo peldaños y llegar a la absoluta".
Pero los sueños van más allá. Dado por sentado que, como ellas mismas indicaban, "lo primero son los estudios", ambas tienen claro otra cuestión: jugar en Estados Unidos. "Creo que es la meca del fútbol femenino", señala Marta, quien añade, "jugar allí, en algún equipo universitario para poder estudiar y luego llegar a profesional, sería lo más grande. Compaginar fútbol y estudios sería lo perfecto, aunque también me gustaría jugar en España. La pena es que el Real Madrid no tiene equipo femenino, pero sí en uno de los grandes, como el Atlético de Madrid o el Barcelona".
Patricia no se queda atrás y comparte los mismos pensamientos que su hermana en cuanto a querer salir del ámbito insular para desarrollar una carrera profesional como futbolista "aunque en Gran Canaria es donde mejor fútbol femenino hay en las islas, digan lo que digan", señala.
La realidad, sin embargo, para ellas, está aún en esta tierra. De momento, juegan en el Aguiluchos y han sido convocadas varias veces a la selección canaria. Ahora les llega la llamada de la selección española. Otro paso más en su trayectoria, pero dados todos ellos con pies de plomo, porque simplemente es cuestión de ir quemando etapas, pero con tranquilidad.
