A sólo un paso de las puertas del cielo. El Herbalife Gran Canaria depende de sí mismo hoy ante Movistar Estudiantes (17.30 horas, Yomvi) en Madrid para certificar su pase a la Copa del Rey. Los pupilos de Aíto ocupan la quinta posición de la Liga Endesa con un balance de 9 victorias y 7 derrotas, un triunfo más que un pelotón de perseguidores: Unicaja, MoraBanc Andorra, Dominion Bilbao Basket, Montakit Fuenlabrada, todos ellos con 8-8. Además, el Granca cuenta con un colchón favorable de puntos sobre ellos: 25, 78, 97 y 110, respectivamente.
Así que el club claretiano tiene, en teoría, el viento a su favor en el Pabellón Antonio Magariños, donde el Estu, penúltimo por la cola, sólo ha cosechado un triunfo este curso, frente al Baloncesto Sevilla hace cuatro jornadas. Sólo un hipotético pinchazo isleño, una carambola de victorias de al menos tres de sus cuatro rivales directos y una remontada del basket-average, apearían de La Coruña a los grancanarios. Algo improbable, pero hasta que no pite la bocina final de esta jornada 17, no se conocerá el desenlace final.
El combinado colegial y el club claretiano son viejos conocidos de la ACB. De su docena de enfrentamientos disputados en parqué madrileño desde la campaña 2003-2004, el balance se inclina del lado enemigo: 7 frente a 5 victorias amarillas. El 10 de noviembre de 2013 fue la última vez que el Granca ganó a domicilio (63-75). En mayo del pasado curso, el Movistar Estudiantes anuló al bloque grancanario por 84-75. Por aquel entonces, el conjunto colegial se jugaba también la permanencia en la máxima categoría del baloncesto español, que deberá encarrilar en esta segunda vuelta liguera. Los madrileños sólo han sumado 3 victorias -Tenerife, Bilbao y Sevilla- y acumulan 13 derrotas, una delicada situación que provocó la destitución el pasado lunes de su entrenador, Diego Ocampo, tras caer doblegados en Murcia.
Ahora, bajo la batuta de Alberto Lorenzo, técnico ayudante del Estu durante ocho temporadas, el cuadro colegial buscará pasar por encima del Granca para salir de la zona roja de la tabla cuanto antes. Pero para ello deberá mejorar sus balances defensivos, su talón de Aquiles. De promedio encajan 84,8 puntos por choque, y de sus trece pinchazos, salvo contra el Rio Natura Monbus Obradoiro, el enemigo le ha endosado más de 80 puntos.
El Estu cuenta con un plantel lleno de canteranos, entre los que despunta el ala-pívot Juancho Hernangómez, el alero Edgar Vicedo y el escolta Darío Brizuela - arrastra alguna molestia, aunque está previsto que juegue-. Estos dos últimos, junto con el base Nicolás Laprovittola, constituyen la referencia exterior colegial, pues promedian en torno al 40% de efectividad en triples cada uno.
En el bloque colegial militan dos exjugadores amarillos: Nacho Martín y Xavi Rey. El ala-pívot vallisoletano, que volvió a ejercitarse con el grupo tras una lesión, es duda para hoy. Por su parte, el pívot catalán se medirá en la pintura con Alen Omic, en una apretada pugna por los rebotes. El Granca registra un promedio total de 34,6 por partido (casi 10 ofensivos y 24,8 defensivos), frente a las 33,3 capturas del rival (10,2+23,1).
De nuevo la afición grancanaria tendrá que esperar para ver el regreso de Kevin Pangos a la cancha. El base canadiense no viajó a Madrid ayer porque aún se está recuperando del golpe que recibió del alero estadounidense del Strasbourg francés Mardy Collins el pasado 6 de enero.
