Los hoteleros canarios tienen claro que hay que desarrollar las energías renovables pero es "impensable" hacerlo en pocos años y con las garantías de que no se va a producir la carestía de la energía a la población y turistas. Para el presidente de la Asociación de Empresarios Hoteleros, José María Mañaricúa, Antonio Morales, presidente del Cabildo grancanario, "está legitimado por las urnas porque la población grancanaria le votó a él y rechazaba el gas", pero las industrias y los hoteles necesitan de este combustible con un precio más económico y menos contaminante que el fuel. Expone que aunque, por ejemplo, en su cadena Gloria Thalasso & Hotels hayan puesto plantas de biomasa o térmica, y se ha logrado reducir el consumo del gas de 900 toneladas a 200, no se va a poder rebajar más. "Necesitamos gas en cocinas y en lavanderías", indica.
Sostiene que los hoteleros y los industriales son los primeros que quieren introducir fuentes energéticas que les ayuden a paliar costes y a lograr un destino limpio, que conlleva mayor atracción turística, pero van a tener que seguir conviviendo las renovables con las fósiles, y mejor el gas que el fuel. En su caso, compran gas propano y mientras en la Península cuesta de 400 a 600 euros la tonelada, en Canarias pagan 1.600 euros y eso no es viable. "Queremos que el gas nos cueste lo mismo que en Bilbao", indica, ciudad donde tienen regasificadoras. Reclama soluciones "a los políticos" para que si no implanta el gas en Gran Canaria propongan otras alternativas viables.
"Si tanto defienden que la industria crezca par a que no haya solo el monocultivo del turismo que la apoyen de verdad y expliquen cómo lo van a hacer, porque no sabemos nada", recalca.
Para Juan Miguel Sanjuán, presidente de Satocan y que estuvo al frente de la empresa Gascan, creada para desarrollar las regasificadoras canarias, el 100% de energías renovables "es una ilusión" y si se construye la regasificadora de Tenerife, y no la de Gran Canaria, "va a dar una ventaja competitiva porque sus hoteles serán más baratos y cualquier nueva industria preferirá instalarse allí por el menor coste de la energía". Se calcula que el ahorro en hoteles con el gas natural de las regasificadoras sería del 50% al 60%.
A su juicio, "lo lógico es que lleguen a un acuerdo: se puede priorizar el gas frente al fuel, con unos compromisos de que se van a ir desarrollando las energías renovables en un porcentaje anual". Indica que si se consiguiera un 100%, la planta de gas hibernaría porque siempre se ha de tener un respaldo por si sucede algo y mejor gas que petróleo. En su opinión, la introducción del gas conllevaría ahorro en la factura en toda España.
