La Dirección General de Aviación Civil ha decidido recortar la bonificación o descuento de que disfrutan los residentes en Canarias y Baleares en los billetes de avión en los casos de tarifas negociadas, viajes en grupo y paquetes turísticos. La medida, que entraría en vigor el próximo 1 de enero, afectaría, por ejemplo, a las tarifas que determinadas empresas puedan haber negociado con compañías aéreas por su volumen de negocio o la frecuencia de sus viajes, a los pasajeros que se desplacen en grupos -estudiantes, mayores, equipos deportivos...- y también a los desplazamientos que se programan con la fórmula del paquete turístico, es decir, los que organizan agencias de viajes o turoperadores y que incluyen avión, hotel y demás conceptos con un precio que no se detalla en función de cada servicio, sino en total. En todos estos casos, la bonificación -que en general es del 50% del billete- tendría un máximo a partir del cual no se incrementaría.
La medida, por tanto, no tendría repercusión en el ciudadano que adquiera su billete de avión individualmente, ya que seguiría disfrutando del descuento del 50%, pero sí en esas tarifas negociadas de empresa, de grupos o de paquetes turísticos. La idea del Ministerio de Fomento, del que depende Aviación Civil, es fijar anualmente una tarifa media para cada ruta a partir de la cual se determinará el llamado MPA, esto es, el Máximo Precio Autorizado. Y ese MPA marcaría a su vez el techo del descuento, de modo que si el MPA se establece en cien euros, la bonificación máxima sería de 50 euros (el 50%). Partiendo de este ejemplo, el descuento seguiría siendo de 50 euros con independencia de que el coste del billete fuera de 150, 200 o 300 euros, dado que estos precios superarían el Máximo Precio Autorizado.
"La medida para el residente puede ser caótica, aunque no afecte, de momento, al cliente directo", explicaron ayer desde la Consejería de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias. ¿Por qué? Porque en el departamento que dirige la socialista Ornella Chacón entienden, por un lado, que las empresas "aumentarán sus costes" y "perderán competitividad" y, por otro, que "a los colectivos -estudiantes, mayores y grupos en general- también les resultará mas caro viajar". Hay que puntualizar, eso sí, que las modificaciones que pretende ejecutar Fomento -modificaciones que se pusieron negro sobre blanco en una resolución de 2014 que en este asunto aún no se había llevado a efecto- no tendría repercusión en las rutas con Obligación de Servicio Público (OSP), de modo que no afectaría a las rutas entre islas, sino a aquellas con la Península.
Desde la consejería que lidera Chacón explicaron que las respectivas áreas de Transporte de los gobiernos canario y balear llevan meses trabajando en la hipótesis de que Fomento decidiera activar la medida, en cuyo origen está el supuesto delito de Air Europa con las subvenciones a residentes, un caso que la Confederación de Agencias de Viajes de España denunció en 2013 y que sigue judicializado por un supuesto fraude de unos 130 millones de euros. El caso es que ni el Ejecutivo que preside Fernando Clavijo ni el Govern balear consideran que esta sea la vía adecuada para minimizar un posible fraude en el futuro. De hecho, el Ejecutivo del archipiélago mediterráneo ya anunció abiertamente días atrás su intención de agotar todas las vías que sean necesarias, incluido el recurso contencioso-administrativo, para que Fomento deje sin efecto la resolución de Aviación Civil.En el Gobierno de Canarias esperan, de momento, el informe que ultiman sus servicios jurídicos para definir la estrategia a seguir. Un informe que podría llegar a la consejería ya los próximos lunes o martes. Con todo, el Ejecutivo regional tiene claro que hará frente común con Baleares hasta conseguir que el Gobierno estatal reconsidere su posición. Las relaciones entre ambos gabinetes son excelentes, tal como evidenció la reciente reunión de Fernando Clavijo con su homóloga de las islas mediterráneas, Francina Armengol.
El temor en la consejería de la socialista Chacón es que la medida de Aviación Civil sea solo un primer paso encubierto para aminorar paulatinamente el descuento de que disfrutan los residentes canarios y baleares, algo que niegan de plano desde el Gobierno.
