Siete empresas distintas, todas ellas con participación isleña, realizarán el diseño de los siete tramos de la línea de ferrocarril entre Las Palmas de Gran Canaria y Maspalomas, con un costo total de 10 millones de euros y un plazo de entrega de 18 meses. Eso permitirá "iniciar la obra civil a mediados del año 2012 y concluirla en 2016", según anunció ayer el vicepresidente y consejero de Obras Públicas y Transportes del Cabildo, Román Rodríguez, quien adelantó que a finales de este mes se adjudicarán también los proyectos de ocho de las once estaciones.
El consejo de administración de Ferrocarriles de Gran Canaria, un órgano dependiente del Cabildo, ha adjudicado los siete tramos del tren a otras tantas uniones temporales de empresas (UTE), en un concurso público al que se presentaron un total de 27 grupos, en concreto empresas de ingeniería especializadas en este tipo de infraestructuras.
Rodríguez señaló que se ha optado por adjudicar sólo un tramo por empresa para "diversificar los trabajos y elaborar los proyectos con mayor rapidez", una fórmula que han utilizado también el Ministerio de Fomento y el Cabildo de Tenerife para sus respectivas líneas ferroviarias. Los 10 millones adjudicados serán aportados íntegramente por el Estado y forman parte de los 25 millones disponibles para poner en marcha los proyectos, un total de 22.
Siete tramos
La construcción de los raíles se ha dividido en siete partes. El primer tramo discurre entre las estaciones de Santa Catalina y San Telmo, uno de los más complicados por ir completamente en túnel en la parte baja de la ciudad. Se adjudicó a la UTE Apia XXI-Geoplan por una cuantía de 1.095.986 euros.
El segundo, entre San Telmo y Jinámar, es el más largo y costoso e incluye entre medias la estación de los hospitales Insular y Materno. También va bajo tierra y diseñará la UTE Sener-La Roche por 1.620.165 euros.
El tercer tramo del trazado, adjudicado a Inocsa-Estudio7 por un importe de 1.364.640 euros, hace el recorrido entre la estación de Jinámar y el polígono industrial de El Goro, con partes en superficie, túneles y viaductos. Tiene entre medias la parada de Telde.
El cuarto tramo de vía, desde El Goro al barranco de Guayadeque, discurre en paralelo a la autopista GG-1 e incluye las estaciones del Aeropuerto y Carrizal. El proyecto, que tendrá que adaptarse a la ampliación de Gando y al parque aeroportuario, se ha encargado a la UTE formada por las sociedades Getinsa, Eyser y Gipic por un importe de 1.552.143 euros.
El quinto también va junto a la autopista del Sur, entre el barranco de Guayadeque y el barranco de El Berriel (cerca del aeroclub). Se adjudicó al grupo empresarial compuesto por Idom, Isocan y Fabasana por 1.515.995 euros.
El sexto tramo discurre en superficie y túnel, ya en la zona turística de San Bartolomé, entre El Berriel y Playa del Inglés, en la zona conocida como El Cañizo. El proyecto lo hará la UTE Eptisa-3G por valor de 1.550.757 euros. El último, entre Playa del Inglés y la estación de Meloneras, se adjudicó a Prointec e Ingenia por valor de 1.532.818 euros.
