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Perfil

El médico 'milagroso'

José Blanco recibió anoche el título de Hijo Adoptivo de Guía a título póstumo por su extensa labor como cirujano, y como director del Hospital de San Roque

El médico 'milagroso'

José Blanco Hernández nació en Gáldar el 23 de marzo de 1888. Comenzó sus estudios de medicina en Cádiz en 1907, tras estudiar el bachillerato en Las Palmas de Gran Canaria. Cinco años después terminaría la carrera "con notable distinción", y en septiembre de ese año fue nombrado médico militar por Real Orden. Prestó sus servicios en Ceuta, donde fue distinguido con una medalla.

Vuelve a Gran Canaria, y en 1914 comienza a trabajar como médico auxiliar en el Hospital de San Martín junto al doctor Ventura Ramírez, donde destacaría su gran labor como cirujano, pasando al poco tiempo a desarrollar su trabajo en Firgas. Los ciudadanos del municipio le llamarían "el médico milagroso".

En una carta al director publicado en el periódico El Eco de Canarias el 31 de diciembre de 1971 titulada 'Añoranzas de un ochentón', añade que: "Procedente de Firgas, llegué a la culta ciudad de Guía de Gran Canaria, con las fogatas de la víspera de San Juan del año 1915, para ocupar el cargo de Médico titular y preparar la inauguración del Hospital de San Roque, entonces en embrión y dirigirlo más tarde".

El Hospital de San Roque de Guía fue inaugurado de manera oficial el 1 de octubre de 1915.Y desempeñó el cargo de director durante 29 años (1915-1944).

Fue el Inspector Municipal de Sanidad y presidente de la Junta Local de Sanidad, desde luchó por las mejoras sanitarias del municipio, como así lo expuso en la misma publicación. Para ello emprendió el saneamiento de las aguas de abasto público y las obras de alcantarillado en la ciudad. "Eran muy pocas las viviendas que disponían de instalación del agua de abasto, del baño y de servicios higiénicos, lo que se consideraba entonces un lujo privativo, de las clases cultas y adineradas". Como anécdota, se dice que en las noches de luna llena no se encendía el alumbrado público con faroles de petróleo para ahorrar costes. Y que las mujeres solían caminar descalzas, y los hombres sucios, y "unas y otros malolientes, cuajados de piojos, pulgas y chinches".

Fue también un gran promotor cultural, fundando el Cuadro Filarmónico y de declamación de Guía, y presidió el Casino de Instrucción y Recreo de Guía. Al jubilarse rehusó que el Ayuntamiento solicitará para él la Cruz de Beneficencia o de Sanidad.

Murió en 1972.

Ahora el Ayuntamiento de Santa María de Guía le ha concedido a título póstumo el título de Hijo Adoptivo.

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