El símbolo del Valle de Mogán, el Molino de Viento, contará el próximo año con un centro de interpretación y un museo al aire libre que pondrán en valor los motivos de la romería de San Antonio de Padua y la historia del municipio tanto para los vecinos como para los visitantes del sur de la Isla. Ayuntamiento, Gobierno de Canarias y Cabildo impulsan un proyecto que pretende incluir en una agenda cultural los recovecos más emblemáticos del valle sureño. Las nuevas instalaciones se elevarán sobre una extensión de 5.400 metros cuadrados aledaños al monumento, propiedad de un vecino, que el consistorio planea comprar por una cantidad aproximada de 30.000 euros.
"Las nuevas generaciones del municipio moganero desconocen la transformación, de agraria y pesquera a turística, que ha experimentado la localidad en los últimos años. Por ello es necesario que tanto los vecinos del Sur como los visitantes cuenten con un referente histórico de lo que ha sido su entorno y en lo que se ha convertido hoy en día. Y eso es un servicio que la administración debe poner al alcance de los ciudadanos", explicó ayer el director general de Cooperación y Patrimonio Cultural del Gobierno de Canarias, Miguel Ángel Clavijo, durante la visita, guiada por la alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, al entorno en el que permanece casi intacto el Molino de Viento de Mogán.
El proyecto, cuya inversión aún no ha sido cuantificada, incluye la creación de un centro de interpretación, una cafetería, una tienda de souvenir, una zona de aparcamiento y un museo al aire libre en el que se puedan apreciar los motivos tradicionales de la romería de San Antonio, que celebra el valle en el mes de junio.
La iniciativa supone, por un lado, la puesta en marcha de una reivindicación de los vecinos del valle, y por otro, un revulsivo económico para el municipio que no requiere de un presupuesto inicial excesivo.
El molino recibe una media diaria de 200 turistas, que paran en la carretera de forma espontánea para visitar el monumento.
