El hotel Waikiki de Playa del Inglés, construido en 1970, culmina esta temporada turística con el estreno de un parque acuático para niños, un gimnasio y una zona de relajación equipada con camas balinesas y jacuzzi. Estas nuevas instalaciones forman parte del proceso de renovación que ha desarrollado el grupo Servatur en el establecimiento de San Bartolomé de Tirajana. Tras la compra del hotel a la cadena Riu por casi 24 millones de euros el año pasado, la compañía canaria ha invertido 7.700.000 euros en elevar de tres a cuatro estrellas la categoría de las 1.016 camas que componen el inmueble turístico.
La compra del establecimiento de Playa del Inglés, propiedad hasta el año pasado de la cadena Riu casi en un 90% de las unidades, constituye la primera adquisición de Servatur de un edificio hotelero en Playa del Inglés.
El grupo, que dirige Santiago Fernández junto a su socio noruego Kai Mikaelsen, comercializa en la costa de Tirajana también otros complejos como Barbados (Playa del Inglés) o Sun's Garden (Campo Internacional de Maspalomas). Sin embargo, el pasado 1 de enero de 2015 el grupo decidió continuar con su plan de renovación turística en el sur de la Isla en una parcela en la que figurara también como titular. La operación se cerró por 23.750.000 euros y supuso también la absorción íntegra de los 189 trabajadores que integraban la plantilla de la cadena mallorquina.
Las 1.016 camas del inmueble, distribuidas en 505 habitaciones, se integran en cinco torres redondas con una superficie ajardinada de más de 3.000 metros cuadrados. Hasta el verano pasado el hotel recibía a sus clientes bajo la fórmula de todo incluido y una categoría de tres estrellas.
Tras las obras de renovación, la infraestructura ofrece el mismo régimen de comidas a sus visitantes pero ha aumentado a cuatro estrellas la calidad de sus servicios. El grupo se encuentra ahora inmerso en la tramitación de este cambio de categoría.
En mayo de 2015 comenzaron las obras. En una primera fase, la empresa Preconte S.L. acometió de forma progresiva los trabajos de mejora en las habitaciones. Para ello el hotel no cerró sus puertas, sino que abordó el proyecto "por torres" de unidades con la precaución de no causar molestias a sus visitantes. Los técnicos de Servatur y el estudio de arquitectos Proyecta 21 se encargaron de impregnar los dormitorios de un ambiente fresco y luminoso.
La segunda fase de la reforma se realizó en los meses de agosto a octubre del año pasado. Durante este intervalo de tiempo los dos restaurantes bufé que ofrece el establecimiento experimentaron un cambio integral no solo en su mobiliario sino en la forma de gestionar su servicio. Ahora solo los platos fríos permanecen al alcance directos de sus 600 comensales, mientras que los platos fuertes se cocinan bajo lo que el sector turístico denomina show cooking o cocina en directo.
Gran parte de los casi ocho millones de euros que ha supuesto la reforma se ha destinado a la creación de una zona infantil, anteriormente ocupada por almacenes y dos canchas de tenis.
En su lugar el hotel ha construido un parque acuático en el que los pequeños pueden tirarse por toboganes, jugar con todo tipo de artilugios de agua y poner en remojo sus energías mientras sus padres disfrutan del sol tumbados en las hamacas. Aledaña a esta piscina infantil se levanta una guardería y un espacio con remos sobre arena.
Esta instalación forma parte del concepto de vacaciones que desarrolla el turoperador alemán Tui bajo el nombre de Suneo Club. El gigante germano ha cerrado con Servatur un contrato de tres años, prorrogable a cinco, para comercializar en el establecimiento este nuevo producto dirigido a familias con régimen de todo incluido a un precio más bajo de lo habitual.
Así, de la mano de Servatur, Tui ha decidido introducir en Canarias una marca que ya explota en otros establecimientos de Baleares, Túnez o Turquía. Esta experiencia pionera ha provocado que empresarios de otras Islas, como Tenerife o Lanzarote, hayan visitado el Waikiki en aras de reproducir la misma fórmula en sus hoteles durante los últimos meses.
Con el proceso de rehabilitación el inmueble turístico también ha ganado en sus instalaciones una "zona de relajación" para adultos dotada con un jacuzzi y varias camas de estilo balinés.
Al otro lado de la piscina principal del establecimiento, descansa una estructura acristalada e integrada en sintonía con los jardines que la rodean. El nuevo gimnasio del Waikiki cuenta con máquinas de última generación para sus usuarios.
Tras culminar las obras el pasado mes de octubre, el hotel ha registrado a lo largo de estos últimos meses un 92,5% de ocupación. Para verano cuenta con unas previsiones similares.
Según Mikaelsen, estas cifras de visitantes son el resultado del "buen hacer de los empleados del hotel y de una buena gestión por parte del grupo". El inversor noruego, quien también en 2012 fue promotor junto a su compatriota Lars Wenaas de la renovación del Hotel La Canaria de Arguineguín, aseguró que esta inversión en el Waikiki ha sido "una de las mejores" operaciones que ha realizado en Gran Canaria. De los 32 millones que ha supuesto en total esta última apuesta de Servatur , la compañía recupera "cerca de cinco millones de euros al año" en concepto de Utilidad Bruta de Operación (GOP).
Tras esta inversión en Playa del Inglés el grupo acumula un total de tres proyecto de renovación en los últimos tres años. En 2013 Servatur adquirió por un desembolso de cuatro millones de euros el complejo de apartamentos de dos llaves que ahora gestiona bajo el nombre de hotel Casa Blanca en Puerto Rico. Las obras de reforma del establecimiento alcanzaron un presupuesto de cinco millones.
Al año siguiente, el grupo reformó los 232 apartamentos que componen el complejo Green Beach de Patalavaca por la suma de 2,5 millones de euros.
También durante 2014 la empresa canaria acometió una mejora parcial en el hotel Puerto Azul de Puerto Rico con valor de otros 2,5 millones. Sin embargo, prevé continuar con una segundo plan de reforma de este establecimiento el próximo año que aumentará este presupuesto en otros seis millones de euros.
Actualmente Servatur, que celebra este año el 40 aniversario de su fundación, gestiona un total de 4.000 camas turísticas repartidas en 10 establecimientos del sur de Gran Canaria.
Al año la empresa factura cerca de 40 millones de euros y no descarta expandir su volumen de negocio a otras Islas.
En los últimos meses los hoteleros de Playa del Inglés han mostrado un interés latente por mejorar sus instalaciones. Además de Servatur, la cadena Riu acomete en estos momentos las obras de renovación del hotel Papayas, ubicado justo al lado del Waikiki. El Caserío, que pertenece al grupo Luis Hoteles, el Santa Mónica, el Aparthotel Playa del Inglés del que acaba de adquirir la cadena López el 70% de sus habitaciones, o los apartamentos Nayra son algunos ejemplos del efecto contagio que produce la renovación enla planta hotelera de Tirajana.
