Ingenio arranca hoy los actos más festivos y callejeros de su Festival Internacional de Folclore. Hasta el sábado, las músicas del mundo y la solidaridad entre los pueblos tomarán el protagonismo en las calles y parques de varios puntos del municipio, desde la céntrica plaza de la Candelaria hasta la avenida Carlos V de Carrizal.
Degustaciones de comida, conciertos, pasacalles y talleres se sucederán hasta llegar a la gran celebración final del sábado en el parque Néstor Álamo, en la que actuarán grupos canarios junto a colectivos internacionales que llegaron ayer a Ingenio. David Castellano, director del festival, se muestra "muy expectante porque con los años se ha ido alcanzando cierto grado de excelencia" en la selección de participantes.
Las comidas interculturales sirven hoy como aperitivo para estos días de convivencia entre grupos folclóricos. Serán los propios miembros de las agrupaciones de países como Estados Unidos o Rusia quienes elaboren algunos platos típicos de sus lugares de origen en cocinas particulares del municipio junto a recetas tradicionales canarias como el frangollo, las truchas de batata o la pella de gofio.
"Son muchos los habitantes de Ingenio que se ofrecen para abrir sus casas y compartir este día con los grupos", destaca Castellano, que reconoce que los organizadores tienen difícil decidir en qué casas serán preparados los platos, dado el alto número de ofrecimientos. Por la noche, la plaza de la Candelaria acogerá la degustación de estas delicias en un acto gratuito y solidario que servirá para recoger alimentos no perecederos que irán destinados al Banco de Alimentos y a varias ONG del municipio.
Pasacalles y talleres
Mañana jueves la fiesta recorrerá la distancia que separa La Cantonera de la plaza de la Candelaria con un pasacalles con las agrupaciones de Marruecos, Estados Unidos, Montenegro, Rusia y -si los trámites burocráticos finalmente lo permiten- Benin junto a grupos canarios como Coros y Danzas de Arrecife. "Será todo un espectáculo revestido de un halo de luz, sonido y vivencias", anticipa Castellano.
El viernes se repetirá el jolgorio callejero vespertino, en este caso en Carrizal. Durante la mañana el público también será protagonista con un taller que ayudará a descubrir los pasos básicos de algunas de las danzas que las agrupaciones les enseñarán. Los artistas no sólo serán maestros: también se convertirán en alumnos, aunque en su caso de lucha canaria, ya que en otro de los talleres podrán probarse la ropa de brega y aprender algunas mañas de este deporte, como la burra o el toque por dentro.
La gran final del festival llegará el sábado con el acto de clausura, un acontecimiento que ya traspasa fronteras y que, como señala Castellano , servirá "como carta de presentación del municipio" para los millones de espectadores que ven la retransmisión televisiva.
