'Las voces del silencio' es el título del documental que ha realizado la ONG Cooperación Internacional Dona VidaNG sobre el envío de gofio a Nepal y que será emitido durante este mes de junio por la Televisión Canaria.
"Miles de hogares canarios tendrán la oportunidad de ver el trabajo altruista de unos voluntarios valientes en las aldeas rurales más necesitadas del país nepalí", señala Germán Domínguez, presidente de la ONG.
'Las voces del silencio' es un documental dedicado a los niños y niñas de la casta intocables de Nepal. "Las historias están reflejadas en cuatro testimonios que, multiplicados, representan los miles de casos a los que la Organización de Cooperación Internacional Dona Vida tiene que enfrentarse en su día a día en la lucha constante para superar las barreras y los obstáculos que en muchos de los casos se encuentran en la sociedad donde vivimos, es decir, en nuestro propio mundo", afirma Domínguez Naranjo.
"Este importante trabajo ela-borado en Nepal con entrega y amor por los integrantes de Cooperación Internacional Dona Vida está dedicado a todos los niños y niñas que nacen, viven y mueren sin ser escuchados, y que en muchos casos sus voces son silenciadas por el mero hecho de haber nacido niña o de un intocable y un descastado".
Castas
El Código Civil de Nepal de 1854 legalizó el sistema de castas y declaró a la comunidad dalit como "intocable". En una estructura jerárquica hindú, esa etiqueta dicta dónde pueden vivir los dalits, dónde pueden estudiar y dónde pueden socializar. En 1963 se abolió la discriminación por castas en Nepal y se creó la Comisión Nacional Dalit. En 2011 se aprobó la Ley Contra la Discriminación con base en la Casta y de Intocabilidad.
Sin embargo, los dalits continúan siendo marginados. "La violencia contra la comunidad dalit es ignorada o a menudo queda sin denunciar y pasa inadvertida en Nepal", comenta Padam Sundas, presidente de la Fundación Samata Nepal, una organización de investigación que trabaja por los derechos de esta marginada comunidad.
Los dalits todavía tienen prohibido participar en actividades comunitarias, como rezar en los mismos templos que los nepaleses de castas superiores. Estas, además, no comen alimentos que hayan sido tocados por los dalits o no usan los mismos grifos públicos que ellos para beber agua.
