Gran Canaria viene registrando en los últimos cinco años la mayor parte de los incendios que se producen en el Archipiélago. En 2013 en la Isla se contabilizaron el 65% de los fuegos de toda Canarias; en 2014 el dato sitúa en el 46,7%; en 2015 llega al 59,5%; en 2016 supone el 61,4% mientras que en 2017 se eleva al 63,7% . Si bien en su mayoría se trató de conatos, que arrasaron poca superficie, pues fueron 200 las hectáreas afectadas en 2013, unas 13 las de 2014; otras 75 en 2015; y 19 en 2016; el incendio que se inició en Tejeda el pasado mes de septiembre dispara la superficie quemada este año hasta las 1.944 hectáreas, debido a que sólo en este siniestro se quemaron hasta 1.937 hectáreas.

El motivo por el que Gran Canaria supera la mitad de los incendios producidos en Canarias está relacionada con la distribución de la población, según aseguró ayer el ingeniero analista de Fuegos Forestales del Cabildo, Federico Grillo. Tras explicar como las quemas prescritas fueron claves para conetener el avance de este siniestro, explicó que la población grancanaria está "más metida en el territorio", ya que hay más pueblos de montaña, y descartó que se trate de un problema "crónico" de incendiarios, y recalcó que los incendios están relacionados más con accidentes y negligencias.

Grillo apuntó que en la labor de prevención es esencial concienciar a los vecinos de la importancia que tiene retirar la maleza que hay junto a sus casas para evitar que si hay fuego sean pasto de las llamas. En este sentido, añadió que es vital preparar a los ciudadanos para que "sus viviendas se conviertan en un refugio o en un búnker cuando se produce un incendio" porque se ha comprobado que son resistentes ,y sobre todo para cuando no da tiempo a esperar que lleguen los equipos de emergencia.

Por su parte, el presidente del Cabildo, Antonio Morales, que dijo que el "año ha sido duro" para Gran Canaria por el "fuego virulento" que costó la vida de una vecina de San Mateo, destacó que entre las próximas medidas de prevención que acometerá el Cabildo grancanario, figura la creación de una jefatura de sección especializada en la materia, y la ampliación a seis meses de la duración de los contratos de los profesionales de la unidad contraincendios, los equipos Bravo.

En este sentido, explicó que actualmente se contratan de julio a septiembre, que es el periodo de la campaña de riesgo, y la ampliación de contratación dependerá de la climatología en cuanto a si comenzarán desde de junio o postergarán su labor después de que finalice la campaña en función del tiempo.

Otra de las medidas que impulsará el Cabildo será la de elaborar un plan de prevención contra catástrofes dirigido a Protección Civil y todos los ciudadanos, y la realización de un protocolo para actuar con los animales en casos de incendios, además de invertir en políticas de prevención e iniciar una campaña de reforestación a partir de noviembre.

Morales y el consejero de Medio Ambiente, Miguel Ángel Rodríguez, también dijo que se va a seguir "invirtiendo en lo verde", puesto que hay 4,5 millones para plantar nuevos árboles, aprovecharon la presencia de la Delegada del Gobierno , Mercedes Roldós, así como del alcalde de San Mateo, Antonio Ortega, y el personal y responsables de los equipos de emergencias para agradecer a todas las administraciones y a todo el personal y voluntarios que participaron en las tareas de extinción del siniestro de Tejeda.

Campaña

El consejero explicóque el operativo de esta campaña de riesgo que empezó el 1 de junio y se mantuvo hasta el 20 de octubre, ha contado con 235 efectivos, entre brigadas terrestres, presas, patrullas, agentes, vigilantes, y helicópteros, entre otros y el 30 de octubre pasará a está formado por 80 personas entre los equipos Presa, los agentes de Medio Ambiente, el personal del Cecopin, y el equipo técnico que retomarán las quemas prescritas.

Así, puso de relieve como Gran Canaria se ha convertido en pionera en esta técnica, y es de los pocos lugares que cuenta con datos de detención de frentes. Comentó que las conclusiones técnicas serán objetio de estudio en los próximos meses dado el enorme interés, queha suscitado en la comunidad científica y administrativa como es el caso de Castilla La Mancha, cuyo gobierno se va a trasladar a la Isla para conocer los resultados de estas quemas.

Por su parte, el jefe del Servicio Técnico de Medio Ambiente del Cabildo grancanario, Luis Fernando Arencibia, indicó que las investigaciones de los fuegos sufridos en la Isla entre 2013 y 2015 han permitido ir trabajando en las causas que originan incendios, de tal forma que se ha comprobado que las quemas de rastrojos dejaron de ser la primera causa de fuego por negligencia.