Un jurado popular declaró ayer culpable al guardia civil de Costa Teguise que ha sido juzgado esta semana en la Audiencia de Las Palmas por quedarse con pequeñas cantidades de droga intervenidas en diferentes controles. Sin embargo, a pesar de los hechos probados, los miembros del tribunal solicitaron al magistrado que lo preside, Ignacio Marrero, la suspensión de la ejecución de la pena para evitar el ingreso en prisión del agente.

Por ese motivo, para ajustarse a los requisitos legales y cumplir la voluntad del jurado, el fiscal Ignacio Stampa solicitó un año y nueve meses de cárcel por un delito de malversación, es decir, sólo un mes menos que el límite legal establecido para poder acordar la suspensión de la pena, lo cual es posible si no existen antecedentes delictivos que impidan acogerse a ese beneficio. La Fiscalía reclamaba al inicio del juicio dos años y tres meses de cárcel.

Stampa también ha pedido una multa de tres meses a razón de 15 euros, así como la suspensión de empleo o cargo público durante un año y cinco meses. Además, de confirmarse la sentencia, el agente será expulsado de la Guardia Civil, según revelaron las partes en el juicio.

Droga en sobres

El jurado considera probado que el agente se apoderó en abril de 2010 de 1,4 gramos de cocaína. La droga fue intervenida a un particular en la vía pública y el guardia civil la sustrajo de un sobre que debía custodiar.

Además, el 28 de abril de 2010, con el fin de obtener beneficios económicos, el guardia civil guardó en su domicilio 16 gramos de hachís, 1,70 gramos de marihuana y 0,50 gramos de cocaína, sustancias que procedían de incautaciones en la vía pública. El jurado, en cambio, no considera probado que la droga hallada en su mochila fuera sustraída para sus beneficios personales, sino por razones de su trabajo en el grupo de Seguridad Ciudadana de Costa Teguise.

El agente juzgado, antes de acceder a la Guardia Civil, fue soldado profesional en el Ejército de Tierra durante más de seis años. En su expediente no tiene ninguna sanción disciplinaria. Ahora presta servicios en La Candelaria, Tenerife. El juicio sólo queda pendiente de la sentencia que dicte el juez, que se ajustará a los hechos declarados probados. El fallo es susceptible de recurso ante el TSJC.