La vieja zona azul volverá a la capital en agosto, año y medio después de su desmantelamiento como gestión privada. Al menos, esto es lo que pretende Sagulpa, la sociedad que gestiona los aparcamientos, cuyo gerente, Carlos Santana, informó el pasado martes en el consejo de administración de la empresa, que el próximo mes de mayo irá a comisión de pleno la modificación de las ordenanzas para poner en marcha de nuevo los parquímetros, ahora de titularidad pública.

Según fuentes del consejo de administración de Sagulpa, que se encargará de la gestión de estos aparcamientos, se pretende que las modificaciones sean ratificadas en el pleno de mayo y después habrá que esperar un mínimo de 45 días, tiempo de información pública, para su entrada en vigor.

En cualquier caso, sólo se pondrá en marcha una primera fase, que consistirá en volver a recuperar las 2.000 plazas de la vieja zona azul. Aún no hay fecha para la entrada en funcionamiento de las otras 14.800 plazas que el gobierno local prevé crear para ampliar la zona azul y dotar a la ciudad de aparcamientos para residentes (zona verde) y trabajadores (zona naranja), indicaron las fuentes de Sagulpa.

Para recuperar la vieja zona azul, sólo será necesario hacer una revisión de las máquinas expendedoras para ponerlas otra vez en funcionamiento, pero la creación de los aparcamientos verdes y azules requiere una inversión para la que no hay partida, señalaron las fuentes.

El gobierno local pretende crear un total de 16.800 plazas, de las cuales 5.859 serán zona azul, 5.783 para residentes y 5.230 para trabajadores. Los parquímetros serán gestionados por los 27 trabajadores de la zona azul que trabajaban para la empresa, los cuales fueron despedidos hace ahora un año. Las tarifas estipuladas para la zona azul establecen un coste mínimo de 20 céntimos para los primeros veinte minutos; 60 céntimos por una hora y 3 euros por 3 horas, el tiempo máximo de estancia.