Cuando un barco atraca en un muelle después de haber pasado una larga temporada en alta mar, suele aprovechar para restablecer su fondo de provisiones. De proporcionarles estos suministros -comida, bebida, equipamiento náutico, utensilios de cocina...- se encargan los llamados provisionistas de buques, que funcionan como si de supermercados para buques se tratasen. La asociación de provisionistas de buques Provicanarias, creada hace un año, aúna a 17 empresas que desarrollan esta labor en el Puerto de La Luz y de Las Palmas. Desde la asociación exponen que sus objetivos principales son promocionar los puertos canarios, al suponer en el Atlántico un punto estratégico de unión entre los continentes de América, África y Europa, y defender los intereses de los provisionistas canarios, "uniéndonos para constituir un frente común ante la problemática del sector, como tratar con los organismos oficiales y las administraciones públicas o la lucha contra el intrusismo".
De este modo, Provicanarias nace para promover la defensa de los derechos e intereses comunes que afectan al sector del aprovisionamiento de buques, constituyéndose en interlocutor frente a diferentes administraciones, organismos e instituciones públicas y demás entidades privadas, todo ello para una mejora y optimización en el ejercicio de su actividad comercial portuaria.
Los 17 socios de la asociación, cuyo presidente es Carlos Diaz Ortega, son Anidia, Ascanio Química, Atlansea, Comercial Naval Canaria, Delsan Seguridad, EMS Seven Seas, Emicela, Entrepot, Idamar Atlantic, Lotus Bunkering, IPG Montajes y Contratas Técnicas, Morpul, Nautical, Puerto Market, Rice & Foods, Suisca y TLC Tinerfeña de Lubricantes.
Según explica la junta directiva, se realizan distintos tipos de actividades. En reuniones, los socios llevan a cabo una puesta en común de las problemáticas a las que se enfrentan en su operativa diaria y proponen soluciones de forma consensuada. También se planifican acciones de promoción, como asistencia a ferias internacionales, y se acuerdan medidas a tomar con respecto a las diferentes administraciones y entidades públicas, como Hacienda o Aduanas. Igualmente asiste a jornadas y conferencias que se lleven a cabo en relación al sector portuario y mantiene a su asociados al corriente sobre la normativa o novedades que afecten a la industria.
Los socios de Provicanarias atienden a todo tipo de embarcaciones que llegan al Puerto y que precisan de sus servicios. En este sentido, ofrecen equipos de electrónica naval y comunicaciones; servicios integrales de comunicación vía satélite, navegación y acústica de pesca; asesoramiento técnico, instalación, puesta en marcha, mantenimiento y reparaciones de sistemas de navegación, comunicación y pesca; y productos alimenticios y bebidas, entre otros.
Además, garantizan rapidez en el avituallamiento, servicio a cualquier hora y día del año, suministros a bordo del buque y suministros offshore de mercancías de todo tipo de volumen y variedad de productos.
La junta directiva asegura que el sector de las provisiones a Buques se ha visto muy afectado por el incremento de la competencia "que sufrimos" desde Europa. "No podemos competir en igualdad de condiciones debido a los requisitos formales a los que somos sometidos, existiendo un agravio comparativo con respecto a otros operadores no nacionales. El propio Registro de Empresas Acreditadas (REA) es un fuerte y grave impedimento a la hora de poder cumplir con nuestra actividad exportadora", señala. Asimismo, considera necesaria y urgente la creación de un estatuto especial para los suministros a buques, "de manera que podamos ser más ágiles, eficientes y competitivos en nuestra actividad comercial".
Cuestionados acerca de hasta qué punto La Luz es el motor económico de Las Palmas de Gran Canaria, los miembros de la junta directiva, si bien no lo consideran tal, sí lo ven como una parte muy importante de la locomotora económica de la capital, y "sin él está claro que no existiría la ciudad tal y como la conocemos hoy en día".
"Si la comparamos con otras ciudades de las islas", prosiguen, "podemos comprobar que la actividad económica en Las Palmas de Gran Canaria, concretamente, se ha desarrollado en gran medida gracias al puerto".
Aunque no se atreven a dar el dato concreto de las personas que trabajan directamente en el Puerto, "de lo que podemos estar prácticamente seguros es de que en esta ciudad no se puede establecer una relación entre más de tres empresas sin que una pertenezca al sector portuario en cualquiera de sus diferentes actividades: navieras, consignatarias, astilleros, talleres, logística y, cómo no, suministradores".
En lo que se refiere a la importancia de los provisionistas de barcos, y más en concreto de un suministrador de buques en las Islas Canarias, ponen como ejemplo que, de no haber sido por alguno, "Cristóbal Colón, en su parada en estas Islas, no hubiese podido aprovisionar sus naves para cruzar el Atlántico".
