Silos Canarios, la empresa que lidera el almacenamiento de cereales en el Archipiélago, no necesita contratar estibadores para sus operaciones de carga, descarga y trasbordo al pasar la mercancía por tuberías. Es lo que se desprende de la sentencia del Tribunal Supremo dictada a finales de diciembre que deniega el recurso de casación presentado por la Coordinadora Estatal de Estibadores Portuarios contra un fallo del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) de 2014. Este también a daba la razón a la compañía en un recurso contencioso-administrativo contra una resolución de la Autoridad Portuaria que rechazaba la posibilidad de que el grano quedara exento de dicho servicio. Con esta sentencia, dictada por la Sala de lo Contencioso-Administrativo, sección Tercera, se da carpetazo a un conflicto que ya duraba cinco años.
El portavoz de la Coordinadora Estatal de Estibadores Portuarios. Miguel Rodríguez, indicó ayer que no recurrirán la sentencia pese "haber estado defendiendo nuestra postura hasta el final" e intentando llegar a un acuerdo con Silos Canarios. "La respetamos, aunque como es lógico no nos alegramos", dijo Rodríguez, quien señaló, no obstante, que la sentencia no será óbice para continuar trabajando con la compañía y "llegar a un acuerdo" para incluir en sus operaciones a trabajadores de la estiba.
Fuentes de la empresa, que opera en el Puerto de La Luz desde finales de los años 50 del siglo pasado, se mostraron, por su parte, satisfechos con la sentencia que ha venido a darles, finalmente, la razón sobre una disputa en la que "desde un principio no quisimos entrar" ya que desde hace más de 20 años la compañía opera sin estibadores debido a su sistema de carga y descarga mediante tuberías y con el per- sonal mínimo de la empresa. Primero con bombas de aspiración, y desde hace unos años con un pórtico de descarga de transporte neumático, que permite trasladar la mercancía directamente desde la bodega del barco al silo con un solo operario que maneja la maquinaria con un mando a distancia.
El presidente de Fedesport (Federación Canarias de Empresas Portuarias), José Juan Ramos, expresó también su satisfacción porque la decisión del Supremo viene a cerrar un litigio abierto desde 2011 en el Puerto pero que, afortunadamente, "no ha causado perjuicios a nadie".
En este sentido, el portavoz de los estibadores explicó que durante la época de bonanza económica de La Luz se dejó de asistir este tipo de actividad en beneficio de otras por el escaso número de trabajadores que necesitaban durante la descarga de la mercancía " y se dio por hecho que no necesitaban estibadores".
Cuando llegó la crisis económica, los estibadores reclamaron ese espacio. La Autoridad Portuaria informó a favor de los estibadores, pero el Tribunal Superior de Justicia de Canarias primero, y ahora el Supremo, le han quitado la razón tras el recurso administrativo que presentó la compañía, que en los últimos años está trabajando desde la Luz codo con codo con el Programa Mundial de Alimentos.
