El tránsito de contenedores ya no es lo que era hace cosa de tres o cuatro años, pero el incremento de la actividad durante este año ha propiciado que el movimiento de mercancía supere los diez millones de toneladas en el primer semestre. Así se desprende de las estadísticas publicadas ayer por la Autoridad Portuaria de Las Palmas, en la que se señala que el paso de carga por el recinto ha subido un 15% entre enero y junio gracias, sobre todo, al transbordo que se apunta un 36,41% más con un total de 4,8 millones de toneladas.
La explicación se encuentra, según han indicado responsables portuarios, en el incremento de la actividad comercial en los países de la fachada occidental del continente africano. Esto ha propiciado una mayor presencia de buques portacontenedores durante los últimos meses, que ha conllevado consigo el aumento del movimiento de mercancía. No obstante, el Puerto registró en junio su undécimo mes consecutivo en positivo en cuanto al tránsito de containers se refiere, después de una intensa crisis durante 2015 y más de la mitad de 2016 cuando esta actividad, una de las más importantes para las empresas portuarias, se quedó por debajo del millón de depósitos más de una década después.
Así, entre los meses de enero y junio de este año han pasado por las diferentes terminales de contenedores del Puerto un total de 468.508 cajones, que supone un 17,7% más que en el mismo periodo del año anterior. En el conjunto de los tres puertos de la provincia (La Luz, Arrecife y Puerto del Rosario), esta cifra se incrementa hasta los 518.252. Si continúa esta tónica, la Autoridad Portuaria de Las Palmas podría recuperar la psicológica cifra del millón de contenedores tras tres años.
Aunque la economía africana sea la principal explicación, esta tendencia también se encuentra relacionada con el aumento del consumo interno del Archipiélago gracias al auge del turismo. No obstante, el primer semestre arrojó un total de 20,96 millones de pasajeros en los aeropuertos canarios, un millón más que el año anterior. A ello se une el crecimiento de la economía de las Islas, derivado de la llegada de visitantes, que se sitúa en torno al 3%.
Con estos datos se desprende que tanto la carga como la descarga de mercancías crecen en el Puerto. En el caso de la mercancía saliente, el acumulado anual es de 3,8 millones de toneladas -incremento del 20%- mientras que las importaciones, la carga desestibada, alcanza las 5,7 millones de toneladas y un 17,27% más.
Y si la mercancía aumenta, el avituallamiento de los buques, en cambio, retrocede hasta un 6,49% con un total de 1,1 millones de tonelada de combustible (-7,9%) y 139.894 kilos de agua (7%). El registro negativo del bunkering está relacionado con el accidente provocado en abril por un ferri de Naviera Armas en La Esfinge, que destrozó parte de las canalizaciones de la multinacional Oryx que, por ende, mermó su actividad.
A este sector también afecta el arribo de un menor número de buques al recinto portuario. Y es que en el primer semestre del año han pasado por los diferentes muelles 4.498 barcos, que supone un 2,81% menos que en 2016. Sobre el tipo de embarcaciones, tanto el número de mercantes como el de pesqueros marcaron registros negativos. En el caso de la histórica flota que faenaba en los caladeros cercanos presenta una imagen paupérrima, convirtiéndose en una actividad casi inexistente. Sólo 130 de los 4.498 barcos que han utilizado La Luz eran pesqueros, el 2,89%. Y ello se refleja en las estadísticas de la pesca congelada: 100.100 toneladas, que comparado con el primer semestre de 2016 arroja un 26% menos de tráfico.
Otro dato negativo es el tráfico rodado con una caída del 5%. Esto significa que por el Puerto pasaron durante los primeros seis meses 101.952 vehículos, cuando el año anterior lo habían hecho 107.449. Estos registros se producen a pesar de que las matriculaciones avanzan en la senda positiva en el Archipiélago con 25.504 turismos nuevos, un 7,4% más. La razón: la adquisición de vehículos por parte de las empresas alquiler ante el boom turístico.
