Al final de sus 'largas' vidas, las estrellas colapsan produciendo una gran explosión conocida como supernova.
En esa explosión se desprende una gran cantidad de energía, luz y átomos que viajan por las galaxias y llegan a formar parte de los planetas y de nuestras propias vidas. No le faltaba razón al genial científico y divulgador Carl Sagan cuando afirmaba: "Somos polvo de estrellas que mira a las estrellas".
En una de esas miradas interestelares, un grupo de astrónomos ha identificado la supernova más brillante de las registradas hasta la fecha. Bautizada como Asassn-15lh, brilla 570.000 millones de veces más que el Sol. Esto supone un nivel de luminosidad equivalente a veinte veces el que producirían juntas las 100.000 millones de estrellas de nuestra galaxia.
(*) Premio europeo de Divulgación Científica