Querido amigo, tenemos un país de traca. En octubre hará un año que estamos sin gobierno y los políticos siguen sin aclararse, y ni siquiera se entienden dentro de su propio partido.
En el PP opinan que Rajoy tiene que dar cabida a alguien más joven y con carisma porque el gallego ya ha tocado fondo. En el PSOE Pedro Sánchez y Susana Díaz se tiran los trastos disputándose un liderazgo que ninguno de los dos parece que tiene. Por su parte, a Unidos Podemos se les ha atragantado el nombre, no funcionó la unión con el partido de Alberto Garzón por lo que Íñigo Errejón dice que "Si podemos, nos separamos" pero, al final, lo que diga Iglesias va a misa, así que tendrán que madurar más la cosa.
De Ciudadanos y Albert Rivera hay que decir que el muchachito está de pisapapeles y a la orden de lo que usted mande. Se dedica a bailar la yenka y va saltando de izquierda a derecha, delante y detrás de uno, dos y tres, a ver con cuál de los tres se queda.
Y se pregunta uno, Gregorio, que si esta gente no es capaz de arreglar los problemas dentro de su propia casa, cómo es que van a arreglar los problemas de todo el país.
Es como aquel chapuzas que tenía un taller con un cartel en la puerta que ponía: "Arreglamos cualquier clase de avería. Para atenderle, por favor: toque fuerte en la puerta porque el timbre no funciona"
El turismo es la mayor industria que tenemos en España y hay miles de hoteles, restaurantes y bares en todo el país, pero resulta que para trabajar de camarero o cocinero no hace falta saber ni las cuatro reglas, luego pasas de camarero a recepcionista en unos apartamentos y, aunque apenas chapurrees un idioma, si tienes un buen déjame-entrar te puedes convertir en director de hotel... y es que nos titulamos por la escuela práctica de sargento chusquero.
Mientras tanto, los jóvenes que se han sacrificado estudiando una carrera superior tienen que emigrar si quieren llegar a ser algo, porque aquí nadie les va a dar trabajo.
Somos un país "low cost", Gregorio, y cuando bajan los sueldos y las prestaciones sociales, sube la bolsa y baja la prima de riesgo porque los inversores están contentos. Por el contrario, si los trabajadores ganan para vivir dignamente, este país deja de ser rentable para los especuladores.
En los años sesenta, Federico "El gitano" dejó el colegio con apenas catorce años y se fue de camarero al sur. Trabajó duro durante muchos años para darle una carrera a su hijo. Ahora está jubilado y su hijo es abogado... pero no consigue trabajo de camarero en el sur. Maldita sea.
Los ingleses decidieron marcharse de Europa y quedarse en Inglaterra, tienen suerte. Nosotros no podemos marcharnos de ninguna parte porque no tenemos dónde quedarnos...
Un abrazo, amigo, y hasta el martes que viene.
