La Provincia - Diario de Las Palmas

La Provincia - Diario de Las Palmas

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Opinión

El espíritu de A Toda Vela

Con la perspectiva que te da el tiempo, uno echa la vista atrás, con magua en la memoria, y con alegría en los recuerdos, pone el punto de mira en aquel programa de Televisión Española en Canarias que me tocó dirigir y presentar, allá por el año 1993, y durante 6 años. La idea del programa era promocionar la vela latina canaria, y también los deportes náuticos canarios en general, pero sobre todo la difusión de las regatas de botes y barrquillos, como televisión pública en Canarias para atender las especificidades cultuales del Archipiélago. Y uno, con las ideas claras desde entonces del sentido regional que siempre ha distinguido al Centro de Producción de Programas de TVE en Canarias, se lanzó a la aventura náutica, como un maravilloso reto profesional pero también personal. Esa idea, ese espíritu del programa A Toda Vela caló en la audiencia, y sobre todo en las gentes de la vela latina, tanto en la familia botera como en la de los barquillos. Y después de superar recelos, desconfianzas, complejos e insularismos se dieron pasos de intercambios, encuentros y promociones de las distintas modalidades. Así, hubo quien se atrevió a organizar un curso de botes en Santa Cruz de Tenerife, por ejemplo. Y también organizar un campeonato regional de barquillos de vela latina femenino, impulsado por Marcial Morales en la empresa Grupo Faycan y Hertz Canarias. Luego, al frente de la Orden del Cachorro Canario en Lanzarote, fue quien promovió la recuperación de la pega entre el Porteño y el Isla de La Graciosa en el año 2008. Y en ese sentido regional de la vela latina también es justo recordar el Encuentro Tres Islas, que organizó en el año 1995 el Ayuntamiento de Puerto del Rosario con motivo del Bicentenerio de la capital de Fuerteventura, con su gerente Manuel Molina Garnica como principal promotor. Allí, botes y barquillos realizaron un intercambio de las tripulaciones. Por eso, cuando uno ve este nuevo encuentro regional entiende que la labor realizada como profesional de una televisión pública es fundamental para la promoción, divulgación y difusión de los valores identitarios canarios, en este caso con un deporte popular y marinero. Justo es reconocer que hombres de ella, como los ya finados Fernando Roque, Felo Monzón Geara, Antonio El Rubio o Antonio Betancort pusieron mucho de ellos en aquel programa A Toda Vela, desde sus responsabilidades en la Federación de Vela Latina. Al igual que José Juan Hernández Duchemín y Lorenzo Lemaur, desde los barquillos de Lanzarote, o Juan Tomás Figueroa con los de Fuerteventura. En fin, gente canaria con alma regional que compartieron ese espíritu de A Toda Vela.

Compartir el artículo

stats