- ¿El informe para el Gobierno canario sólo estudia los resultados de PISA 2009?

- Tenemos esos datos. Pero no sólo se trata del desempeño de los alumnos sino también del contexto. Todas esas situaciones son las que queremos analizar.

- ¿Ha encargado el Gobierno de España una consulta similar?

- Llevamos muchos años trabajando con el Gobierno de España para mejorar los resultados educativos. La cuestión no es generar un informe. Se trata de conseguir un compromiso sostenible por parte de España para mejorar los resultados educativos. Hay un hecho muy sencillo, y es que si España evalúa los resultados a nivel de las comunidades autónomas ya es un signo en sí mismo de que quiere compararse a los mejores sistemas educativos del mundo. España y Canarias tienen buenos colegios, buenos docentes. La pregunta es: ¿cómo conseguir que el éxito de esos colegios, de esos profesores, se ponga a disposición de otros colegios, de otros profesores, para que en general mejore el sistema?. No se trata de leyes, de normas. Hay que crear un entorno en el que los colegios tengan una responsabilidad importante porque trabajan en un sistema educativo donde se tiene que generar y compartir el conocimiento.

- ¿Dónde están las causas que condicionan los malos resultados escolares?

- Pues la alta tasa de repetición de curso, pero también una elevadísima tolerancia al fracaso. Por ejemplo, los estudiantes de entornos desfavorecidos a veces obtienen buenas notas aunque no tengan buen rendimiento escolar. Así que el sistema no tiene el nivel de expectativas de padres y de profesores que sí que tienen modelos educativos de alto rendimiento. La repetición de curso simplemente refleja cómo es el sistema, en el que no se acepta la responsabilidad del fracaso de forma seria y rigurosa.

- ¿Hay indolencia entre docentes y padres, que no asumen que el éxito escolar va parejo al progreso?

- Los datos económicos que tenemos sobre España son muy serios. Si observamos a las personas que están sufriendo hoy (el paro) son todas con bajísimos niveles de formación. Los resultados del mercado laboral indican que en esta sociedad hay una brecha creciente entre los ricos, los que tienen una mejor formación, y aquellos que tienen bajas cualificaciones. Los datos de España también demuestran que profesores y padres no son conscientes de este aspecto. Por ejemplo, muchos padres piensan que el colegio al que acuden sus hijos es bueno incluso si los resultados del PISA demuestran que no es un colegio tan bueno.

- La inestabilidad legislativa en este país, ¿que efectos puede generar?

- La ley no es nunca el final de una reforma. Siempre es el principio. Tiene que haber una consistencia en la política educativa, eso tiene una importancia fundamental. Si vivimos en una democracia sabemos que algún día va a ser la oposición la que gane las elecciones y si no podemos ponernos de acuerdo en los fundamentos de la educación, de una forma que sea coherente y consistente a lo largo del tiempo, una reforma supone un reto muy difícil.

- Se critica a PISA su gusto por el ranking de países.

- Yo creo que el ranking de regiones y países es, en el mejor de los casos, el comienzo de un debate. No debemos descartar la importancia que tiene hacer comparaciones por que en una aula podemos tener a un estudiante de una familia acomodada y de una familia pobre. No es justo comparar a esos dos estudiantes pero cuando esos alumnos salgan del sistema educativo van a estar en el mismo mercado laboral. Y tampoco es justo comparar a Finlandia con Canarias por muchas razones. Por tanto, no es justo hacer rankings de países pero es importante hacerlo para aprender las lecciones que nos muestran los sistemas educativos de mejor desempeño. Eso sí que es lo relevante.