Menos del 20 % de las plazas que conforman las plantillas policiales están ocupadas por mujeres, una diferencia de sexo que se incrementa de forma considerable a medida que se avanza en la jerarquía de mandos, donde la presencia femenina es prácticamente inexistente.
Así lo afirmó Montserrat Fillol, técnica de la Comisión Autonómica de Violencia de Género de la Dirección General de Seguridad y Emergencia del Gobierno de Canarias, que ayer impartió en la capital grancanaria la jornada Igualdad de género en seguridad y emergencias, organizada por la Academia Canaria de Seguridad. El objetivo de este evento, al que asistieron más de medio centenar de agentes locales, autonómicos y de emergencias, fue el de favorecer e impulsar la paridad en las plantillas.
"La policía sigue siendo hoy una profesión donde hay más profesionales hombres. Además son cuerpos jerarquizados y para acceder a los puestos de mando se toman en cuenta la antigüedad y los méritos. Como hasta hace unos años las mujeres no entraban a los cuerpos policiales, evidentemente la mayoría son hombres".
Fillol explicó a los agentes que la discriminación laboral en los cuerpos de seguridad y emergencia no tiene su origen en la norma, puesto que la ley fija el acceso a través de unas pruebas físicas perfectamente delimitadas para hombres y mujeres, tomando en cuenta las diferencias biológicas de cada sexo, además de adaptar los mecanismos laborales para que la conciliación familiar o la maternidad no sean una traba.
El problema, según destacó la experta, "está en los prejuicios internos y sociales, sobre todo machistas, o de la misma mujer que se lo impone como techo de cristal", e indicó la necesidad de diseñar estrategias internas y externas para combatir la discriminación de la mujer a la hora de acceder a los cuerpos de seguridad y emergencia. Entre ellas citó la información y la sensibilización entre los agentes.
"Hay que hablar del tema, que los policías sean conscientes de que existe un problema de desigualdad y trabajar en ello. Los cuerpos policiales tienen que ser sensibles a ese seguimiento de la igualdad dentro de sus grupos de trabajo, que la mujer sea más participativa en cuanto a las decisiones que se toman", concluyó.
